Descubre a tres mujeres robando en su casa y su reacción es increíble

Las cámaras de vigilancia instaladas en casas particulares, empresas o en la vía pública nos han permitido ser testigos de multitud de acontecimientos que hubieran pasado desapercibidos de no haber quedado grabados. Uno de los últimos ejemplos fue el de un coche que provocó un accidente con una moto al saltarse un semáforo y se dio a la fuga, aunque pudo ser detenido poco después gracias a las grabaciones de las cámaras.

Esas cámarasson ya muy habituales en domicilios particulares. No solo sirven para comprobar si alguien entra en nuestro hogar, sino que también provocan un efecto protector contra la vivienda: si los ladrones ven que una casa tiene vigilancia, es lógico que pasen de largo y traten de robar en otro lugar donde no puedan ser grabados.

El último vídeo que se ha vuelto viral en las redes sociales es el de un hombre que grabó cómo un grupo de tres mujeres trataban de robar un electrodoméstico del patio de su casa. Tenía instalado en su vivienda un sistema de vigilancia y recibió un mensaje en su teléfono móvil alertándole de que había movimientos en la parte de atrás.

La reacción más inesperada

Tal y como publica Milenio, eran más de las diez y media de la noche cuando el dueño de la casa recibió el mensaje, por lo que se sorprendió: no esperaba que hubiera nadie husmeando a esas horas en su patio. Así que encendió su ordenador y conectó las cámaras de seguridad, llevándose una gran sorpresa: había tres mujeres allí que trataban de robar un horno.

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El hombre las saludó con un micrófono que tiene instalado en su sistema, consiguiendo que las tres mujeres se asustaran y salieran corriendo. Sin embargo, lo más surrealista pasó a continuación. Primero, una de ellas volvió a entrar en el patio para "hacer un calvo"; es decir, se dio la vuelta, se levantó la falda y mostró sus posaderas desnudas ante la cámara.

Después, dos de las mujeres volvieron a entrar en el patio para tratar de terminar su trabajo, pero el hombre las sorprendió de nuevo. Sin embargo, en lugar de llamar a la policía, el dueño de la casa les dijo que se podían llevar el horno. Las 'ladronas' preguntaron si estaba hablando en serio y si estaba seguro de lo que decía. Y cuando el hombre se lo confirmó, dos de ellas cogieron el horno y se lo llevaron.

Una de las mujeres iba descalza, casi desnuda, y se levantó su falda, enseñando sus posaderas a la cámara de seguridad

Lo más curioso de esta escena, más allá de la reacción del dueño de la casa, es la vestimenta de las ladronas. Una iba semidesnuda y sin zapatos, como si fuera una vecina que acababa de salir de casa con urgencia, mientras las demás iban más vestidas. Nunca esperarían que su intento de robo terminara convirtiéndose en un regalo.