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Cuidado: esto es lo que todo el mundo puede saber de ti sólo con verte
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una cuestión de percepción

Cuidado: esto es lo que todo el mundo puede saber de ti sólo con verte

Numerosos científicos han estudiado qué aspectos de una persona se transmiten en un vistazo y cuán erradas suelen ser nuestras percepciones. Pero muchos aciertan

Foto: En sólo unos segundos hacemos un juicio de la persona que conocemos, y normalmente no nos equivocamos. (iStock)
En sólo unos segundos hacemos un juicio de la persona que conocemos, y normalmente no nos equivocamos. (iStock)

Las apariencias engañan. O no. Diversas investigaciones científicas han coincidido en señalar que bastan unos pocos segundos para hacernos una primera idea de la persona a la que acabamos de conocer. Esta primera impresión, que viene determinada por pequeños detalles como el lenguaje corporal o el aspecto, es decisiva, pues determina cómo van a discurrir las primeras fases de una relación. Y sí, podemos equivocarnos respecto a una persona, pero la información que procesamos no es falsa y, en muchas ocasiones, no está errada.

Numerosos científicos han estudiado qué aspectos de una persona se transmiten en un vistazo y cuán erradas suelen ser nuestras percepciones. Por mucho que disimules, hay una decena de atributos que la gente suele captar al vuelo, tal como recuerdan Drake Baer y Shana Lebowitz en 'Business Insider', sean estos reales o no.

Si eres honesto

Los humanos tardamos menos de una décima de segundo en emitir un juicio sobre la confianza que nos transmite un interlocutor. Y esa primera impresión es difícil de borrar. Un grupo de investigadores de la Universidad de Priceton pidió a 245 estudiantes que valoraran el atractivo, la simpatía, la agresividad y la honestidad de una serie de actores mirando una foto de su rostro. La mitad de ellos contaban con 100 milisegundos para emitir el juicio y la otra mitad todo el tiempo que quisieran. El estudio mostró que las percepciones de todos los atributos (incluido el atractivo) variaba entre los dos grupos, pero el juicio sobre la honestidad era el mismo.

Si tienes dinero

La gente de una clase socieconómica alta suele distinguirse por una serie de atributos estéticos fácilmente identificables. Es cierto que la historia de la moda ha evolucionado a medida que los pobres imitaban lo que llevaban los ricos y estos se veían obligados a vestir de otro modo, pero cada momento cuenta con una serie de marcas y distintivos que sólo puede permitirse la clase pudiente. Si ves a un tipo con un polo Lacoste, un Rolex, mocasines y el jersey anudado al hombro es de alto estatus con casi total probabilidad.

Si eres gay

Hay personas en las que es difícil adivinar su orientación sexual, pero son las menos. Como mostró un estudio de 2008 la mayoría de la gente es capaz de percibir si un hombre es homosexual tan sólo viendo su cara durante menos de un segundo.

Si eres listo

Hay un atributo concreto que hace a la gente parecer más lista: mirar a los ojos de la gente cuando te está hablando. Eso al menos asegura un estudio de 2007 liderado por la doctora Nora A. Murphy, profesora de la Loyola Marymount University. En la investigación participaron 182 estudiantes que tenían que discutir en pareja sobre asuntos diversos durante cinco minutos. Tras las conversaciones cada participante debía valorar la inteligencia de su interlocutor. Los resultados mostraron que la gente que era vista como lista era aquella que miraba a los ojos de las personas cuando hablaban.

Si eres exitoso

Al igual que ocurre con determinadas marcas de alto estatus, hay atributos que suelen distinguir a las personas de éxito, y uno muy claro son los trajes hechos a medida. Un grupo de científicos turcos y británicos mostró fotografías de hombres con trajes de sastrería y de tienda normal a un grupo de 274 personas y, en sólo cinco segundos, tendían a calificar a los primeros como más exitosos que los segundos.

Si eres atrevido

La gente no sólo emite juicios primerizos por tu apariencia, también por la forma en que te mueves. Basta dar un par de zancadas para transmitir una imagen bastante acertada de nuestra actitud frente al mundo. Un pequeño estudio publicado en la revista 'Cognition' mostró que asociamos las formas de andar flexibles con gente extrovertida y audaz y las formas de andar más rígidas con la gente maniática. Lo interesante del asunto es que la mayoría de participantes se equivocaron en sus juicios.

Si eres agresivo

Al contrario que otros atributos, la agresividad de una persona sí puede intuirse con bastante certeza. Una investigación publicada en la revista 'Psychological Science' asegura que las mujeres son capaces de distinguir con bastante acierto la agresividad de un hombre viendo su rostro en una fotografía durante 39 milisegundos. Otros científicos han señalado la aparente relación existente entre los hombres que se dejan crecer vello facial (grandes barbas y bigotes) y su agresividad.

Si eres religioso

No es muy difícil distinguir a una persona religiosa si lleva velo, alzacuellos o daga, pero aunque vaya de paisano, también tiene ciertos atributos distinguibles. Un estudio dirigido por la doctora Laura P. Neiman, de la Universidad de California en Berkeley, mostró cómo un grupo de 123 estudiantes era capaz de distinguir con bastante eficacia a las personas religiosas tan sólo viendo fotografías de cuerpo entero de las mismas. ¿Qué les distinguía? Era la gente que sonreía y parecía relajada.

Si eres extrovertido

Bastan 50 milisengundos para juzgar con acierto si una persona es extrovertida (o, al menos, se considera como tal). Se trata de gente que suele mostrarse risueña cuando la están fotografiando, por lo que no es extraño que en los experimentos los participantes acierten a la hora de calificarles. Así ocurrió al menos en un estudio alemán donde acertó la mayor parte de la gente a la hora de valorar este atributo.

Si eres un líder competente

Investigadores de las universidades de Tufts y Toronto fotografiaron a 100 directivos de importantes despachos de abogados y pidieron a un grupo de estudiantes que valoraran diferentes rangos de su personalidad, incluyendo la dominancia, la madurez facial, la simpatía y la confianza. Tras esto los científicos combinaron los resultados para formar sólo dos variables: “poder” (que mezclaba la dominancia y la madurez facial) y “calidez” (simpatía y la confiabilidad). Los estudiantes no se equivocaron: los directivos con mayor “poder” eran aquellos que dirigían las empresas que tenían mayores beneficios.

Las apariencias engañan. O no. Diversas investigaciones científicas han coincidido en señalar que bastan unos pocos segundos para hacernos una primera idea de la persona a la que acabamos de conocer. Esta primera impresión, que viene determinada por pequeños detalles como el lenguaje corporal o el aspecto, es decisiva, pues determina cómo van a discurrir las primeras fases de una relación. Y sí, podemos equivocarnos respecto a una persona, pero la información que procesamos no es falsa y, en muchas ocasiones, no está errada.

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