Los amigos de Oriol Pujol se jactaban de adjudicar emisoras de radio en Cataluña

Quien tiene contactos políticos, tiene también un camino abierto para hacer negocio, una senda que puede convertirse en peligrosa si no se utiliza con cautela. Sergio Pastor, uno de los principales encartados en el caso de la trama de las ITV descubierta en Cataluña, movía sus peones para influir en todos los sitios que podía. Incluso en la concesión de las licencias de radio autonómicas.

Según se desprende del sumario, Pastor había amarrado la concesión de una frecuencia que quería colocar a buen precio. Para ello, se servía presuntamente de sus contactos tanto en Convergència como en Unió Democràtica. Según una conversación mantenida el 10 de marzo del 2001, el empresario ya está moviendo el asunto junto al periodista Humberto Salerno, e intenta presionar a la cúpula de Gestiona Radio. En esa conversación, Pastor le dice que llame al diputado convergente Antoni Fernández Teixidó “porque así será tantear Convergència por dos lados” y, si no pasa nada, tocará a Unió.

Que el empresario está enterado de muchas cosas parece evidente, puesto que los dos interlocutores hablan de llamar incluso a David Madí, ex responsable de Comunicación de Convergència, que ya entonces se había pasado a la empresa privada. Y Pastor recomienda ponerse en contacto con él porque ya actúa desde fuera de CDC y así no parece una operación dirigida desde el Gobierno. Porque, argumenta, Madí se encuentra en “grandes proyectos”, “como “la privatización de parte de TV3, que se quedaría el grupo Godó”, editor de La Vanguardia. Pastor subraya también que está convencido de que Madí “sigue moviendo muchos hilos” aunque dejó sus cargos oficiales en Convergència.

Las negociaciones con la emisora fueron duras, según se desprende del sumario. En un momento determinado, Salerno se queja de que Borja, uno de los directivos de la radio, le había enviado un mail muy duro y que, tras hablar por teléfono, le había pedido disculpas.

Humberto Salerno, por su parte, negó a El Confidencial conocer el interés de Gestiona Radio por emitir en Cataluña. “No conozco esa operación”, dijo a preguntas de este diario. Tras la insistencia en el tema, zanjó la conversación señalando que “de esto no tengo nada que comentar”.

Pero las pruebas son irrefutables. Según las manifestaciones de Pastor, Salerno movió los hilos para verse con Oriol Pujol, Fernández Teixidó e Imma Riera, consejera nacional de CDC y portavoz de CiU en la comisión de Industria, además de con otras personas. En la manga, el empresario se guardaba la baza de acudir a la dirigente de Unió Misericordia Monlló, alcaldesa de Ulldemolins. Su estrategia era que Salerno “agote las vías” de Convergència antes de echar mano de su contacto con los democristianos.

En otra conversación, el propio Salerno reconoce que mantuvo una reunión con Teixidó y éste le derivó hacia otras personas porque el tema “se le escapaba de las manos”.

“O con nosotros o con nadie”

El 15 de marzo, ambos vuelven a ponerse en contacto para hablar del tema y el periodista le comenta que la respuesta de Gestiona Radio, a quien están intentando colocar la licencia, “es decepcionante” y que desconfía de ellos porque le da la sensación de que quieren hacer algo por su cuenta. Entonces, Salerno le comenta a Pastor que estudia la posibilidad de enviar un correo a su interlocutor en la radio madrileña diciéndole que no sólo no le va a acompañar en el proyecto, sino que le pondrá todas las dificultades para que pueda entrar en Cataluña. Un chantaje en toda regla.

El 16 de marzo, Pastor llamó al periodista y le comunicó que el “alto mando” había dado luz verde a la adjudicación de una frecuencia de radio. El empresario, además, le vino a decir que hablase con Borja, de Gestiona, para que se decidiese de una vez, pero que le dejase claro que si no era con ellos no podría entrar en Cataluña con nadie. Y, por si fuera poco, que si les hacía perder el tiempo, conseguiría que le odiasen al otro lado del Ebro. El periodista prometió hacerlo y ser contundente porque, con la frecuencia al alcance de la mano, tenían el “elemento fuerza” de su lado.

Quince días después, Salerno le comunica que Borja no contesta a sus llamadas, por lo que duda del proyecto que tienen entre manos. Ante la negativa de la emisora a entrar en su juego, Pastor le contesta entonces que la prioridad en esos momentos es encontrar inversores, ya que necesitan un millón de euros. ”La frecuencia está en marcha y eso no se puede parar”, le subraya el empresario. Y le da como alternativa que reúna a un grupo de periodistas interesados que se integraría en el proyecto con un 30% y los Sergios (es decir, Sergio Pastor y Sergi Alsina, su socio y también integrante de la trama) podrían aportar el 70% restante.