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Ordenan embargar 100 millones en acciones a los hijos de Gil… y el Atleti se salva
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NO TIENEN ACCIONES DEL CLUB HEREDADAS DE SU PADRE

Ordenan embargar 100 millones en acciones a los hijos de Gil… y el Atleti se salva

Los hijos de Jesús Gil han alegado desde que murió el patriarca familiar que carecen de patrimonio para soportar los frentes judiciales que quedaron en el

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Ordenan embargar 100 millones en acciones a los hijos de Gil… y el Atleti se salva

Los hijos de Jesús Gil han alegado desde que murió el patriarca familiar que carecen de patrimonio para soportar los frentes judiciales que quedaron en el aire tras el mandato marbellí de su padre. Pero ahora el Tribunal de Cuentas acaba de ordenar el embargo de acciones por valor de 100 millones a los cuatro herederos del antiguo regidor de Marbella. Lo más curioso es que el Atleti se salva porque, sobre el papel, los Gil no tienen ni una acción del club heredada de su padre (Miguel Ángel Gil Marín sí es el máximo accionista del club, pero adquirió su participación con dinero propio).

La alcaldesa de Marbella ha detallado que las acciones que han sido embargadas son 3.999 de Vegángeles S.A, 449 de Montajes Incor S.A., 1.560 de Compañía Internacional de Bienes Reales, 3.600 de Abastecimientos El Carrascal S.L., 9.000 de la entidad Club Financiero Inmobiliario S.A., 9.999 de la entidad Promotora Inmobiliaria La Alcazaba S.A., 9.000 de la entidad Promociones Futbolísticas S.A., 55.000 de la entidad Amz S.A.,499 de la entidad Presidencia del Club Atlético de Madrid S.L. y 8.298 de la entidad Myramco S.L.

En un primer momento se solicitó el embargo de las acciones del Atlético de Madrid pero, al tener conocimiento de que los hijos de Gil no habían heredado participación alguna en el club rojiblanco, el Ayuntamiento pidió la adopción de nuevas medidas cautelares que pudiesen garantizar la citada responsabilidad de los hijos del exalcalde.

La orden se estipula en una sentencia que estima una demanda de responsabilidad contable interpuesta por el Ministerio Fiscal en noviembre de 2005. A dicha petición se adhirió tres años más tarde el equipo de Gobierno municipal regido por la actual alcaldesa Ángeles Muñoz. La regidora calificó ayer esta resolución “como muy favorable para los intereses de la ciudad” (la ciudad tiene más de 200 millones de deuda) y evidencia el empeño del Ejecutivo local “por recuperar el patrimonio que fue saqueado por los anteriores gobiernos municipales”.

El embargo de las acciones es una decisión contra la que no cabe recurso y se realiza tras una sentencia, emitida el 12 de abril de 2011, en la que se cifra en 66,5 millones de euros los perjuicios ocasionados al Ayuntamiento, más otros 39,1 millones en intereses.

Sentencia de gran volumen económico

En la providencia se declaran responsables directos solidarios a los cuatro hijos de Jesús Gil, Jesús, Miguel Ángel, Óscar y Miriam Gil Marín. La sentencia emitida en abril, ante la que cabe recurso de apelación, también condena de forma solidaria a Pedro Román a pagar al Ayuntamiento 41,8 millones de euros más los intereses correspondientes, mientras que al exalcalde Julián Muñoz se le condena por 10,3 millones más 5,2 millones de intereses. Para el resto de los condenados, las cifras son también significativas. 

El exedil Rafael González tendrá que pagar 59,4 millones de euros más 33,5 millones de intereses; su excompañero del GIL Antonio Luque, las mismas cantidades que Julián Muñoz, y la también exedil Marisa Alcalá, 4,1 millones más 3,3 millones de intereses. La sentencia desestima que exista responsabilidad contable sobre la exconcejala Dolores Zurdo, que también estaba implicada. 

¿Dónde están los bienes?

Los hijos de Jesús Gil han alegado desde que murió el patriarca familiar que carecen de patrimonio para soportar los frentes judiciales que quedaron en el aire tras el mandato marbellí de su padre. Pero ahora el Tribunal de Cuentas acaba de ordenar el embargo de acciones por valor de 100 millones a los cuatro herederos del antiguo regidor de Marbella. Lo más curioso es que el Atleti se salva porque, sobre el papel, los Gil no tienen ni una acción del club heredada de su padre (Miguel Ángel Gil Marín sí es el máximo accionista del club, pero adquirió su participación con dinero propio).