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El PP multará con 300 € a sus diputados provida, igual que Villalobos con la ley Aído
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cuatro parlamentarios insisten en la disidencia

El PP multará con 300 € a sus diputados provida, igual que Villalobos con la ley Aído

En el partido intentan evitarse el espectáculo de desunión en un tema que reconocen que sigue siendo muy delicado por la misma falta de consenso interno que obligó a Rajoy a renunciar a la reforma

Foto: Varios trabajadores del PP ante la sede del partido. (EFE)
Varios trabajadores del PP ante la sede del partido. (EFE)

Los cuatro diputados del PP que siguen dispuestos a votar en contra de la proposición de ley de su propio grupo parlamentario para enmendar la vigente ley del aborto serán multados con los 300 euros de rigor. Es el mismo procedimiento seguido por los populares cuando Celia Villalobos se saltó la disciplina de voto para lo contrario: no ir contra la ley Aído sobre la interrupción del embarazo. El Grupo Popular mantiene su presión sobre los parlamentarios díscolos y cuenta con compensar sus previsibles bajas con el apoyo ajeno que pueden prestar los 6 diputados de Unión Democrática y el portavoz de UPN.

Después de la renuncia a la reforma integral de la ley del aborto y la consiguiente salida del Gobierno del desautorizado ministro Alberto Ruiz-Gallardón, el PP se limita a llevar al Congreso una iniciativa para cumplir el aspecto más concreto sobre la cuestión que incluía su programa electoral como es la posibilidad de que las jóvenes de 16 y 17 años puedan interrumpir sus embarazos sin conocimiento de los padres. A los diputados pro-vida del Grupo Popular les parece que la reforma se queda muy corta y amenazan con expresar su protesta ante Mariano Rajoy con un no, o más bien con la abstención o la ausencia.

Ante el primer trámite de la toma en consideración por la Cámara baja y después de varias conversaciones con los responsables del grupo parlamentario, tres diputados están decididos a saltarse la disciplina de voto –Lourdes Méndez (Murcia), Javier Puente (Cantabria) yJosé Eugenio Azpiroz (Guipúzcoa)–y hay algunas dudas sobre la decisión final que tome Eugenio Nasarre (Granada).

En el Partido Popular intentan evitarse el espectáculo de desunión en un asunto que reconocen que sigue siendo muy delicado por la misma falta de consenso interno que obligó a Rajoy a renunciar al proyecto de reforma de Ruiz-Gallardón. Los ministros de Sanidad y Trabajo, Alfonso Alonso y Rafael Catalá, han repetido estos días que para el PP el aborto no es ni puede ser un derecho, principio sobre el que se levanta la ley aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Pero los discrepantes insisten en que están ante un flagrante incumplimiento de compromiso electoral del que se sienten en conciencia obligados a protestar.

En fuentes del PP empiezan a asumir que al final les faltarán esos 3 o cuatro votos, insisten en que no pueden admitir que se trate de un asunto de libertad de voto porque el punto de las menores estaba en el programa electoral (el único concreto) y confirman que la indisciplina conllevará una multa que podría llegar a los 600 euros pero que suele quedarse en la mitad. Será la misma sanción que Celia Villalobos abonó en las legislaturas pasadas, cuando se abstenía de apoyar las posiciones de su grupo, tanto en la ley del abortocomo en la del llamado matrimonio homosexual.

La iniciativa del Grupo Popular pasará el trámite sin ningún problema dada la mayoría absoluta del partido en el Gobierno, reforzada en este caso por la posición tradicional de CiU, que sí deja votar en conciencia a sus diputados. Los 6 de UDC estuvieron en su día en contra de la ley Aído y en coherencia deberían apoyar la minirreforma del PP, igual que el parlamentario de UPN Carlos Salvador, que ya lo ha confirmado.

Los cuatro diputados del PP que siguen dispuestos a votar en contra de la proposición de ley de su propio grupo parlamentario para enmendar la vigente ley del aborto serán multados con los 300 euros de rigor. Es el mismo procedimiento seguido por los populares cuando Celia Villalobos se saltó la disciplina de voto para lo contrario: no ir contra la ley Aído sobre la interrupción del embarazo. El Grupo Popular mantiene su presión sobre los parlamentarios díscolos y cuenta con compensar sus previsibles bajas con el apoyo ajeno que pueden prestar los 6 diputados de Unión Democrática y el portavoz de UPN.

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