Es noticia
¿Cómo regenerar la política? Con sueldos más altos y puertas giratorias transparentes
  1. España
desfile de expertos en el congreso

¿Cómo regenerar la política? Con sueldos más altos y puertas giratorias transparentes

¿Mejorar los sueldos de los políticos para regenerar el sistema democrático? Solo mentar el tema de las retribuciones públicas puede parecer un tema tabú

Foto: Fotografía de archivo del Congreso de los Diputados. (EFE)
Fotografía de archivo del Congreso de los Diputados. (EFE)

¿Mejorar los sueldos de la clase política para regenerar el sistema democrático? Sólo mentar el tema de las retribuciones públicas puede parecer un tema tabú en la crisis de desprestigio que arrastran las principales instituciones, pero podría ser uno de los pasos decisivos para ‘resetear’ el sistema.

Así lo planteó ayer ante sus señorías, aunque muy de pasada y sin querer incidir demasiado en un tema que en la calle resultaría –a todas luces– polémico, Benigno Pendás, presidente del Centro de Estudios Políticos y Constitucionales (CEPC), dependiente del Ministerio de la Presidencia, y que fue el primero de los expertos citado por los partidos para reflexionar sobre la regeneración democrática y la lucha contra la corrupción. A su juicio, sólo así se lograría atraer a los mejores hacia la res publica y se evitarían males endémicos como el de los políticos profesionales que encadenan legislaturas aferrados al cargo público.

Pendás acudió a la Comisión Constitucional del Congreso para presentar, fundamentalmente, las dos leyes que ha cocinado en coordinación con la secretaria de Estado de Relaciones con las Cortes: la norma reguladora del ejercicio de los altos cargos de la Administración General del Estado y el proyecto de ley de régimen económico y financiero de los partidos políticos. Se trata de las dos piezas sobre las que el Gobierno quiere abrir ahora el juego con el resto de formaciones para alcanzar un pacto contra la corrupción que ponga coto a casos como el de la financiación en B del Partido Popular o la trama de los ERE en Andalucía.

El director del Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, Benigno Pendás. (EFE)
Fue dentro de estemarco, y después de hacer un alegato a favor de los políticos y en contra del mensaje del “todos son iguales”, en el que Pendás exhortó a los diputados a reflexionar sobre las retribuciones de los políticos. “Piénselo ustedes –explicó–. Sólo un matiz: ¿a dónde hay que descender en la escala de retribuciones de una gran empresa, de una entidad financiera o incluso de una pyme para encontrarse, por ejemplo, el sueldo de un ministro? Es sólo, insisto, un tema para reflexionar”.

Pendás reconoció que se trata de un asunto difícil que habría que abordar sin prejuicios y que la actual situación económica no permite plantearse ningún tipo de medida por ahora. Pero como filosofía a seguir recalcó que sólo así se podrá atraer a los más capacitados. “Como línea de principio hay que pensar seriamente que el prestigio de la política depende también de atraer gente que, por supuesto, no venga a enriquecerse, pero tampoco a perder su cualificación en la vida social y profesional y encima en una actividad que ahora mismo, desgraciadamente, goza de menos prestigio del que merece y puede resultar poco atractiva. El prestigio de la política depende de que atraigamos a la política a la gente más valiosa”.

A favor de las puertas giratorias controladas

A su juicio, este tema debe ir acompañado también de un debate sobre el fenómeno de la puerta giratoria o el salto de la política a jugosos puestos en la empresa privada. Algo que, si se impide estrictamente, produciría, a su juicio, un efecto indeseado. “No queremos una clase política profesionalizada pero, si no hay una manera digna de salir de la política, parece que, evidentemente, estamos fomentando que la gente se quede para siempre en ella. Por tanto, no se puede querer A y no A al mismo tiempo”, añadió.

El número dos del PSOE en las elecciones europeas, Ramón Jáuregui. (EFE)
El socialista Ramón Jáuregui, número dos del PSOE a las elecciones europeas, hizo hincapié en esta segunda cuestión, en la que reclamó mayores líneas rojas. “Es particularmente grave en la sociedad actual, dado el poder del sistema financiero, que la puerta giratoria sea un sistema de vinculación de la política con el sistema financiero”, alertó.

En su réplica, Pendás justificó su posición insistiendo en la idea de que hay que ser capaces de dar una salida digna a quienes han dedicado parte de su vida a servir a la política. “Si no dejamos una vía razonable abierta, por supuesto bajo estrictas condiciones de publicidad y me atrevería a decir que de decoro, en la salida, estaremos fomentando la idea de que la política no se puede salir porque no se puede ir a ningún sitio y, por tanto, abracémonos a los cargos públicos, con todo lo que eso conlleva de pérdida de independencia y de libertad”.

Esta salida, a su juicio, debería ir acompañada de transparencia absoluta, “pudor” en la forma de hacer las cosas y, sobre todo, con información plena a los ciudadanos. “La política no es geometría y, por tanto, siempre hay claroscuros, pero no se puede querer A y no A al mismo tiempo. Si queremos que la clase política se renueve, si queremos que haya más gente que participe, etc., tendremos que dar salida a quien considere que ha cumplido su función en el ejercicio de responsabilidades políticas y quiera reanudar su experiencia profesional”.

Además de Pendás, ayer fueron citados en la primera sesión de la ronda de expertos que deben opinar sobre las medidas para regenerar el sistema el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, y el presidente del Tribunal de Cuentas, Ramón Álvarez de Miranda. Torres-Dulce apoyó en su intervención que los cargos públicos imputados en casos judiciales no dimitan hasta el inicio de la vista oral.

¿Mejorar los sueldos de la clase política para regenerar el sistema democrático? Sólo mentar el tema de las retribuciones públicas puede parecer un tema tabú en la crisis de desprestigio que arrastran las principales instituciones, pero podría ser uno de los pasos decisivos para ‘resetear’ el sistema.

Leyes Política
El redactor recomienda