Bárcenas sólo acusa de momento a Cascos y Lapuerta de conocer la caja B del PP

El extesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas, ha centrado sus acusaciones en el exdirigente popular Francisco Álvarez Cascos y Álvaro Lapuerta. Ellos conocían la existencia de la caja B del partido, es decir, la existencia del manejo de un dinero fuera de la contabilidad oficial reflejada en el Tribunal de Cuentas. Cascos también aparecen en la causa principal del caso Gürtel, después de que la UDEF haya indicado en uno de sus informes que los apuntes de PAC en la caja B de la trama de Francisco Correa se trata de él, a quien se le pagó comisiones ilegales.

Según fuentes presentes en el interrogatorio, Bárcenas ha señalado ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz que siente mucho el empeoramiento físico debido a la avanzada edad de Lapuerta, pero mantiene que él sabía todo lo que ocurría en la tesorería de la formación política. Ha narrado también que el anterior tesorero del PP, Rosendo Naseiro, entregó a Bárcenas a su salida del PP las llaves de la caja fuerte, y que él al comentárselo a Álvarez Cascos le dijo que se las quedara él.

Sin embargo, Bárcenas, actualmente en prisión incondicional, ha negado tajantemente que utilizara ni sacara dinero de esa caja B para su uso personal. Nunca ha sustraído dinero del partido para enviarlo a sus cuentas en Suiza. Sobre este aspecto ha ido dirigido parte del interrogatorio del instructor, quien precisamente le había citado hoy para que aclarara si parte de los 48 millones de euros que llegó a acumular en sus cuentas en Suiza provienen del dinero obtenido a través de donaciones de empresarios al PP.

Todo el dinero que ha conseguido ha sido gracias a sus inversiones inmobiliarias o por la venta de cuadros. También ha relatado que tenía negocios con empresarios uruguayos, con quienes quedaba en hoteles y les daba dinero para invertir y de ahí se llevaba unas comisiones. Recuerda una en concreto de 200.000 euros pero se ha negado dar el nombre de esas personas.

Bárcenas lo ha negado y ya ha adelantado al juez que no va a entregar más documentos. No va a lanzar ninguna bomba explosiva contra ningún dirigente actual del partido, o eso es lo que parece según las fuentes que están presentes en el interrogatorio.

El extesorero ha llegado a la sede de la Audiencia Nacional en un furgón de la Guardia Civil. Quienes e han visto señalan que ha cogido algo de peso y se ha presentado ante el juez y demás abogados de la defensa y acusaciones con un traje, corbata burdeos y camisa de rayas.