Rajoy se juega en el Consejo Europeo su anunciado fin de la recesión y el curso político

El Gobierno es consciente de que sus promesas de recuperación dependen de que vuelva a fluir el crédito y la liquidez para las empresas, e insiste en que la clave para que se haga realidad ese brote de optimismo depende de las decisiones que se tomen en el próximo Consejo Europeo, convocado para los días 27 y 28 de este mes. Es lo que Mariano Rajoy llama "la batalla" de Bruselas por la unidad bancaria en la UE, las ayudas para la financiación de las pymes y los planes contra el desempleo. El Ejecutivo se juega en esa cita el anunciado fin de la recesión y el curso político (segundo de la legislatura).

Rajoy está ya en campaña para reclamar en todas las instancias políticas y económicas, europeas y de ámbito nacional, la reactivación del crédito para las empresas pequeñas y medianas. Es el primer paso para superar la crisis. Ayer se dirigió directamente a la banca para que esté "a la altura de las circunstancias", reiterará el próximo sábado el mismo mensaje en Tarragona en un acto del partido para apoyar la ley de emprendedores y culminará su empeño en Bruselas en la última semana del mes.

En medios gubernamentales dan tanta importancia al desarrollo del Consejo Europeo como a los planes de reformas que tienen que pasar por el Consejo de Ministros en los próximos días, tanto el proyecto correspondiente a la ley de régimen local local como el informe sobre racionalización de las Administraciones. Los avances en la unión bancaria europea son una decisión política que reforzarían el euro y ayudarían a rebajar la prima de riesgo, cuestiones fundamentales para la financiación del Estado. Si en la 'cumbre' no hay progresos, volverían el repunte de la prima, el pesimismo y las dudas sobre la recuperación.

Lo primordial para Rajoy en estos días es lograr que el crédito fluya directamente del Banco Europeo de Inversiones a las empresas para que la reactivación económica y el crecimiento sean un hecho antes de fin de año. En el Consejo Europeo se discutirá un fondo de 60.000 millones de euros para ese fin, más otros 6.000 millones para planes de empleo juvenil, una tercera parte para España como país con más paro en ese sector de la población. 

El jefe del Ejecutivo recordó que la reestructuración del sistema financiero (fin para el que logró un crédito de 40.000 millones de la UE) también se hizo para que el crédito volviera a las pymes, eje de su apuesta por la recuperación económica y motivo por el que promete dar una "batalla importante" en el seno de la UE para que fluya la financiación hacia empresas y autónomos.

En un acto con 'emprendedores' celebrado en la Moncloa, Rajoy dijo que pese a que la reestructuración bancaria va "en la buena dirección", la evolución del crédito en España es "todavía muy insatisfactoria" y que los mensajes del Banco Central Europeo han ayudado a que baje la prima de riesgo, pero no lo suficiente como para facilitar la financiación de las pymes en los mercados.

El presidente del Gobierno defiende sus planes de reformas como medidas urgentes de ámbito interno que se compromete a aprobar o impulsar antes de fin de año (en septiembre el sistema de pensiones), pero de las que no se puede esperar que influyan de forma directa en la reactivación económica en el próximo ejercicio, según insisten en medios gubernamentales. Supondrán ahorros en los gastos de las Administraciones, pero en la línea de los obtenidos en el pasado año. Ayudan a corregir el déficit, pero no suponen inversiones productivas para reactivar y crear empleo en el ámbito privado.

En fuentes del Grupo Popular dan por hecho el acuerdo con Alfredo Pérez Rubalcaba para que Rajoy acuda al Consejo Europeo con el respaldo explícito de la práctica totalidad del Congreso a las posiciones del Gobierno a favor de la unidad bancaria, los créditos a las pymes y las ayudas contra el paro juvenil. Sólo queda por acordar la 'ceremonia' del acuerdo, concretar si habrá foto o no en la Moncloa o en las Cortes o una votación conjunta en la Cámara la próxima semana.