Fernández Díaz pedirá en la UE medidas urgentes contra los ‘yihadistas nacionales’

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, defenderá en la Cumbre de Ministros de Justicia y Asuntos de Interior de la Unión Europea la necesidad de adoptar soluciones contundentes para luchar contra el terrorismo islamista dentro de las fronteras del Viejo Continente, tras los ataques contra soldados en Londres y París y el riesgo cada vez mayor que implica la marcha descontrolada de islamistas nacionales a Siria y el Sahel para unirse a la insurgencia.

La reunión tendrá lugar en Luxemburgo el viernes por la mañana y estará presidida por Allan Shatter, ministro de Justicia, Igualdad y Defensa de Irlanda, el país que ostenta la Presidencia de turno de la UE. Según aseguran fuentes del Ministerio del Interior, Fernández Díaz “reclamará iniciativas para avanzar en la coordinación de la UE en la lucha contra el terrorismo yihadista y reformas legales que permitan perseguir con mayor eficacia este fenómeno dentro de las fronteras europeas”. El máximo responsable de las Fuerzas de Seguridad españolas también pedirá que se extreme la vigilancia contra la radicalización islamista.

Lo cierto es que, aunque la agenda del encuentro prevé el debate sobre cuestiones específicas del Sistema Común Europeo de Asilo, el Tratado de Schengen y el libre movimiento de personas dentro de la UE, la amenaza del terrorismo internacional centrará el núcleo de las discusiones. Según fuentes europeas consultadas por El Confidencial, “se analizarán en profundidad iniciativas coordinadas para responder al desafío de los yihadistas europeos que deciden unirse a los grupos terroristas que están luchando en Siria y el Sahel contra las autoridades locales”.

El peligro de la vuelta 

Lo que más inquieta a los Gobiernos europeos es el riesgo que implica para su seguridad el regreso de estos combatientes a sus países de origen con la experiencia a cuestas de haber participado en una guerra y con un odio aún más exacerbado contra Occidente. Sólo en Ceuta ya se han contabilizado nueve casos de jóvenes que han decidido viajar a territorio sirio para unirse a las milicias que están combatiendo a Al Assad. Al menos tres de ellos habrían perdido la vida. Pero no hay noticias del resto y no es descartable que, llegado el momento, decida emprender la vuelta a territorio nacional. 

Otro peligroso precedente es la red de Abu Dahdah, el hispano-sirio que fue condenado por liderar la sucursal de Al Qaeda en España. A principios de la pasada década, lideró una organización especializada en el envío de radicales a Chechenia, Afganistán e Iraq y en su recepción posterior, cuando abandonaban el frente y volvían a instalarse en territorio nacional.

Según las fuentes consultadas en Bruselas, el coordinador europeo de la Lucha contra el Terrorismo, Gilles de Kerchove, leerá durante la Cumbre un conjunto de recomendaciones para intensificar la persecución de estos yihadistas de ida y vuelta. En concreto, aconsejará que todas las legislaciones nacionales condenen los viajes a zonas de conflicto para unirse a organizaciones terroristas –sólo algunos países de la UE han tipificado este delito-, faciliten el acceso de los investigadores a bases de datos de viajeros para detectar los desplazamientos y mejoren la coordinación con las fuerzas de seguridad de los países de tránsito. En este último caso, la colaboración de Turquía, que comparte fronteras con Siria, Irán, Iraq y el Cáucaso, se antoja determinante.

Recomendaciones contra la radicalización

En todo caso, la última palabra la tienen los Gobiernos nacionales, que mantienen en sus manos las competencias de seguridad. La Unión Europea sólo ejerce labores de liderazgo y coordinación en la mayoría de cuestiones relacionadas con la vigilancia interior. Incluso el control de las fronteras comunitarias sigue en manos de cada uno de los firmantes de Schengen, aunque Bruselas la coordina mediante la agencia Frontex.

De la cumbre ministerial de este viernes en Luxemburgo saldrá también un documento consensuado para solicitar a la Comisión Europea que actualice su estrategia de seguridad con medidas para “luchar contra la radicalización y la captación de terroristas, con el fin de responder a las tendencias actuales, en surgimiento o futuras en el contexto de contrarrestar la atracción del terrorismo”. Más en detalle, el texto urge a la Comisión a que valore el riesgo de las diferentes doctrinas que sustentan las visiones extremistas del islam, el impacto de la crisis económica en el auge del yihadismo, el riesgo que implican las nuevas tecnologías y la necesidad de fomentar la cohesión social e incorporar a las víctimas a las estrategias de respuesta.  

En principio, según adelantan las fuentes de Interior consultadas, la situación de ETA ni siquiera será mencionada por Fernández Díaz. Aparte de tratarse de una cuestión interna, el Gobierno de Mariano Rajoy da por amortizada desde hace meses la capacidad de amenaza de la banda terrorista. De hecho, ni siquiera se menciona a ETA en la nueva Estrategia de Seguridad Nacional que aprobó el Consejo de Ministros el pasado viernes.

Así, Fernández Díaz centrará la mayor parte de su intervención en defender la posición de España en la lucha contra el terrorismo islamista. Sí se prevé, en cambio, que los ministros del Reino Unido y Francia introduzcan a última hora en la agenda la amenaza incipiente de los llamados ‘lobos solitarios’, yihadistas autorradicalizados que ejecutan ataques sin el respaldo de ninguna estructura. El reciente asesinato de un soldado en Woolwich (Londres) y el posterior intento de acabar con la vida de otro en París, en ambos casos a manos de presuntos radicales islamistas, ha provocado la alarma de los socios de la UE ante un fenómeno que puede haber llegado a Europa para quedarse.