Las cámaras del pasillo mortal del Madrid Arena eran carcasas y no grababan

Algunas de las cámaras del Madrid Arena donde fallecieron cinco jóvenes la noche de Halloween en el Madrid Arena eran falsas, incluidas las del vomitorio donde se produjo la avalancha mortal. Según los abogados de las víctimas, que esta mañana han acudido junto a la fiscalía para realizar otra inspección ocular en el recinto municipal donde sucedieron los trágicos sucesos, algunas de las cámaras eran carcasas, motivo por el cual gran parte de los hechos no fueron grabados.

El abogado de Rocío Oña, Felipe Moreno, reconoció que las imágenes de aquellas cámaras que sí grabaron están “perfectamente”. Según el representante legal  de la familia de la joven fallecida, más de 2.500 personas entraron por la salida de emergencia desde el botellón de los alrededores de la fiesta hasta el interior del recinto justo antes del concierto del DJ Steve Aoki, la estrella de la noche.

Abdón Núñez, el letrado de la familia de Belén Langdon, la joven menor de edad que entró en el recinto con el DNI de una amiga, cargó contra el ayuntamiento, a quien acusa de no tomar ningún tipo de medidas para sofocar el “botellón” que había fuera del recinto la noche de autos. Para el abogado, las decisiones que se tomaron fueron “pésimas”, se reaccionó “tardísimo”, no se envió a la Policía Municipal y esto tuvo “una influencia directa” en lo que ocurrió minutos después en uno de los pasillos que conectaba con la pista central.  

En la inspección ocular, los abogados pretenden confirmar una serie de defectos de seguridad, de entradas de bomberos y un conjunto de medidas que no se cumplen, tras las "barbaridades" que las acusaciones particulares aseguran que constataron en la visita anterior. 

¿Botellón en el parking?

Núñez ha detallado que las imágenes grabadas por las cámaras del Madrid Arena revelan que en un momento determinado alguien avisó en el "botellón" de que iba a comenzar la actuación de Aoki. Acto seguido, unas 2.500 personas entraron por la salida de emergencias, que es por donde tendría que haber evacuado el local. Algo que, en su opinión, "es caótico, tremendo. Algo que no tiene nombre".

La investigación del caso se está llevando a cabo por el titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Eduardo López Palop. Núñez ha mostrado su confianza depositada en el juez, y espera que de forma urgente se solucione la falta d emedios del Juzgado para evitar que la instrucción del caso se prolongue durante cinco o seis años.