“España tiene que crecer un 3% para poder pagar la deuda pública”

La deuda pública de España sigue marcando récords. En el primer trimestre del año se incrementó en 39.438 millones de euros y alcanzó un volumen total de 923.311 millones, lo que representa el 87,8% del PIB y la cifra más alta del último siglo. Por primera vez desde que España pasó a formar parte del selecto club de los Veintisiete, la deuda pública de nuestro país ya es mayor que la media de la UE, situada en el 85,4%. La cifra es tan alarmante que el propio Mariano Rajoy reconoció este sábado que una deuda que es prácticamente el PIB "es algo insoportable".

Estos datos empujan irremediablemente a la pregunta ¿Puede España pagar su deuda?. "Sí". La respuesta de los expertos consultados por El Confidencial no deja lugar a especulaciones, pero va acompañada de un requisito igualmente firme: la economía debe crecer y para ello es necesario cambiar la actual dinámica inmediatamente.

"El gasto público tiene que dejar de ejercer de freno a la demanda" 

Para Julio Rodríguez López, miembro de Economistas Frente a la Crisis, la condición sine qua non para que en un futuro España no tenga problemas para pagar su deuda es entrar en una senda de "crecimiento económico razonable, es decir, crecer entre un 2 y un 3%". 

El expresidente de Caja Granada apunta al desempleo como principal problema del país y como indicador de que la actual política económica no está funcionando. "Hay que parar ya la actual dinámica porque una tasa de paro del 26% pone en peligro el pago de las pensiones y hace crecer el endeudamiento. Para evitar que este escenario se consume, Rodríguez aboga por buscar un equilibrio entre el ajuste, para reducir el déficit, y los estímulos.

"El gasto público tiene que dejar de ejercer de freno a la demanda. Para animar la economía la Administración central tiene que dirigir el gasto público a la creación de empleo, en colaboración con las comunidades autónomas, e incentivar áreas como el I+D", analiza el economista. 

A su juicio, el cambio debe pasar necesariamente por una concienciación por parte de las autonomías del problema del desempleo. "España tiene un problema, y es que los ayuntamientos sólo se preocupan de la recalificación de suelo y la concesión de licencias de obras, dejando al Estado solo ante las cuestiones verdaderamente importantes", critica.

"Si seguimos con el actual ritmo de endeudamiento habrá quita" 

"No tenemos salida dentro de la Unión Monetaria". Así de contundentemente se expresa Juan Francisco Martín Seco. Este economista no duda de la capacidad de España para pagar su actual deuda, pero se muestra convencido de que si se mantiene esta dinámica el país "necesitará una quita como la de Grecia". 

Evitar llegar a ese punto dependerá, según Martín Seco, de que las contradicciones de la Unión Monetaria afecten a Alemania y Francia. "En ese momento se romperá el euro, no es que se vaya a producir nuestra salida porque ningún gobierno tomaría esa decisión unilateralmente. Así que viviremos un efecto cascada a partir de la obliga salida de uno de sus miembros o será una decisión consensuada, pero sea como fuere los gobiernos tienen que deshacer este invento, que nació condenado al fracaso", analiza.

Para este economista la crisis de la economía española no es tanto un problema individual, sino del conjunto de la Unión Europea: "Estoy convencido de que se va a romper el euro porque no es posible que Alemania y Grecia tengan el mismo tipo de cambio; ya era insostenible en los 90 y se ha vuelto insoportable ahora". 

Ante la posible salida de la moneda única, España tiene que prepararse para un "férreo control de los capitales". En este sentido, Martin Seco apuesta por medidas más contundentes que las tomadas hasta ahora: "Es necesario aplicar sanciones penales a todo aquel que no declare el dinero que tiene en el extranjero". Además, cree que es necesario "decidir entre ajustes o estímulos, porque el negro con el blanco no se puede mezclar". Él lo tiene claro: "España debía haber empezado mucho antes a relativizar el tema del déficit".

"La austeridad a ultranza nos ha hecho perder dos años y medio" 

Para Manuel de la Rocha Vázquez, economista de la Fundación Alternativas, no existe ningún tipo de duda de que España podrá pagar su deuda. Sin embargo, cree que a medio y largo plazo mantener la solvencia dependerá de "estabilizar las primas de riesgo en valores cercanos a los niveles de financiación alemanes, que haya crecimiento para que se recuperen los ingresos y baje el desempleo para desahogar a la Seguridad Social".

Además, considera que "la austeridad a ultranza nos ha hecho perder dos años y medio" y celebra que, por fin, todos -a excepción de Berlín y Finlandia- se hayan dado cuenta de que "ahogar no es la vía para salir de la crisis". 

La solución para De la Rocha Vázquez pasa por el crédito. "Hacen falta herramientas que incentiven a los bancos a prestar a las pymes", asegura. Y apunta a medidas unconventionals, como la impulsada en Reino Unido. "Allí el Banco de Inglaterra diseñó un plan que abarata la financiación de los bancos cuanto más presten: por cada crédito adicional a pymes le da a la entidad 10 libras de financiación", recuerda.

Para este economista España debe perder el miedo a la subida de la inflación. "Hay que inyectar dinero a la economía: la inflación puede subir uno o dos puntos sin que esto sea un problema", apunta mientras recuerda de lo "imprescindible" de una unión bancaria en Europa.

"Es mejor un 100% de deuda si crecemos que un 90% sin hacerlo" 

"Más importante que la cifra de deuda es el vencimiento y la capacidad de refinanciación a unos intereses favorables. Lo importante es empezar a crecer: sería peor un 90% de deuda creciendo en negativo, que un 100% haciéndolo en positivo". Es es el análisis de Ignacio Zubiri, catedrático de Hacienda de la UPV. Para él, un nivel de deuda del 85%, en el que diez puntos son de deuda bancaria, todavía dan margen a España para devolver lo recibido y sitúa en un 100% la barrera simbólica a no superar. "Pero no hay que obsesionarse en este sentido porque tenemos países como Italia o Bélgica con niveles superiores", recuerda.

A la pregunta ¿Dónde se para la actual dinámica? Zubiri responde sin dudar: "Aquí y ahora. Hacen falta recortes con estímulos: mantener la austeridad hasta que España crezca y el déficit se acerque al 3%". El economista cree que el Gobierno debe empezar a hacer las cosas de diferente manera: "Las dos grandes reformas del Gobierno no han funcionado. Por un lado, la reforma laboral se ha traducido en más desempleo y la reforma bancaria no ha hecho que el crédito llegue a las empresas". Y señala la decisión del Banco Central Europeo de garantizar la compra de deuda en los mercados secundarios como la única beneficiosa para economía española.

Para el catedrático España tiene que hacer frente a un problema estructura que arrastra desde siempre: no crea empleo. "Para generar puestos de trabajo tiene que atraer a las empresas, para ello, a corto plazo tiene que mantener el gasto público, conseguir que fluya el crédito obligando por ley a las cajas rescatadas a que presten a las pymes y crear los mecanismos adecuados para que sea posible crea una empresa en 3 días. Además, se debe mejorar la cualificación y, excepcionalmente, subvencionar a los sectores más débiles", apunta.

Además, a largo plazo y a juicio de Zubiri, el mercado laboral español requiere una apuesta clara por el capital humano y la promoción por méritos. "La Educación debe mejorar y no empeorar, como suceden ahora y, además, España debe tener una economía de mérito: que los puestos los consigan los más eficientes y que los contratos con la Administración los consigan los mejores y no los más amigos", zanja.