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Grifols se aferra al dividendo y a la mejora del beneficio para derribar la barrera de los 30 euros
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BPI LE DA UN POTENCIAL DEL 25%

Grifols se aferra al dividendo y a la mejora del beneficio para derribar la barrera de los 30 euros

Hay margen para esperar nuevas subidas en Grifols. Después de comenzar el año con algunas dudas en su cotización bursátil, desde principios de abril la compañía

Foto: Grifols se aferra al dividendo y a la mejora del beneficio para derribar la barrera de los 30 euros
Grifols se aferra al dividendo y a la mejora del beneficio para derribar la barrera de los 30 euros

Hay margen para esperar nuevas subidas en Grifols. Después de comenzar el año con algunas dudas en su cotización bursátil, desde principios de abril la compañía se anota un 8,5%, hasta los 29,4 euros a los que cerró este martes. Sin embargo, los expertos consideran que hay margen para esperar nuevos repuntes después de que la empresa de hemoderivados se haya anotado más de un 130% desde principios de 2012. Esta semana los analistas de BPI han revisado sus previsiones sobre la compañía y han elevado su precio objetivo hasta situarlo en los 36,7 euros desde su estimación anterior de 32,4. Esto supondría una revalorización de los títulos de casi un 25% que rompería la barrera de los 30 euros en la que ha chocado en los últimos tiempos el valor y que está sustentada en una mejora del entorno macroeconómico en España, en el crecimiento del beneficio por acción y siempre a la expectativa de avances en los tratamientos para paliar los efectos del alzhéimer.

 Esta semana la compañía catalana celebra su investor day en Texas (EEUU), del que no se esperan grandes anuncios, más todavía después de que la firma confirmara que volverá a pagar dividendo dos años después. En concreto, la retribución al accionista ascenderá a 0,20 euros por acción a cuenta del resultado de 2013 que se abonará el próximo 5 de julio. Esto implica que destinará una cantidad total de 68,75 millones de euros, después de dos ejercicios sin retribuir a sus accionistas en efectivo para sanear la compañía tras la compra en junio de 2011 de la norteamericana Talecris.

En opinión de los expertos de BPI, esto “contribuirá a dar más visibilidad al valor”, pero no es el único aliciente que apoya la mejora de las perspectivas. La mejora del entorno macroeconómico en España con la caída de la prima de riesgo a un nivel estable por debajo de los 300 puntos básicos es uno de los aspectos que tienen en cuenta en todas las recomendaciones que realiza esta casa de análisis. En el caso concreto de Grifols, también da alas el hecho de que ha estado mostrando una mejora de la gestión tributaria en los dos últimos trimestres, que se beneficia de las deducciones de I+D y también de cambios de consolidación en el mercado estadounidense.

“Ahora estamos esperando una tasa impositiva efectiva del 32,5% (35% anterior) y hemos revisado al alza nuestras previsiones de BPA en un promedio del 7% para el período 2013-2016”, apunta el analista Ignacio Ortiz de Mendivil. Para estos expertos, Grifols sigue siendo un valor “muy bien posicionado, líder en su sector y bien diversificado a nivel mundial”. La pasada semana Ramón Riera, presidente de la División Comercial de la compañía, apuntaba en la Junta General hacia Turquía, India y Rusia como "países inmediatos de expansión".

Otro aspecto significativo para los analistas es la deuda de la compañía. Desde BPI señalan que, dada su capacidad de generación de caja y su balance saneado, es posible que alcance a lo largo de 2014 acuerdos para renegociar el pago de un bono por valor de 1.100 millones de dólares al 8,25% que expira en 2018. En esta misma línea, desde Citi consideran que, “aunque sería factible esperar un dividendo complementario a lo largo del año, es más probable que Grifols se decante por utilizar ese dinero en reembolsar el importe de los bonos de alto rendimiento”. La entidad estadounidense da un precio objetivo a doce meses al valor de 34 euros. 

No obstante, sigue habiendo varias firmas que apuntan a que es un valor que ya está caro y prefieren mantener la cautela, a la espera de que la compañía aporte nuevos datos sobre su información financiera y su estrategia empresarial de cara al medio plazo. Este es el caso de los analistas de Espirito Santo, que esperan un “crecimiento sostenido, apoyado por los factores demográficos favorables (envejecimiento población), el aumento de los gastos de salud en las economías emergentes, y las nuevas aplicaciones para los productos derivados del plasma”. Es por ello que las expectativas apuntan a “una tasa de crecimiento a largo plazo anual de 7%, en línea con el crecimiento histórico de la industria”. 

El fármaco sobre el alzhéimer en la recámara

Los avances en el perfeccionamiento de un fármaco que mitigue los efectos del alzhéimer son el gran caballo de batalla de la compañía. Los ensayos mediante una proteína extraída del plasma denominada albulima constituyen uno de los principales ejes de investigación del grupo. La cotización de las acciones no descuenta ningún avance significativo en esta materia, por lo que todo lo que pueda llegar en este sentido beneficiaría a los títulos en el parqué.

Desde Citi descartan que la firma se haya podido ver afectada por los malos resultados registrados por Baxter, uno de los principales competidores de Grifols, que hace unas semanas anunció que sus ensayos con inmunoglobulina habían resultado fallidos en su fase terminal. "Dado que la base de la investigación es radicalmente distinta (a partir de dos proteínas diferentes: albumina y inmunoglobulina), los resultados fallidos no van a hacer más mella en el valor más allá de lo que lo hicieron cuando se conoció la noticia. Está totalmente descontado", añaden.

Fuentes del mercado aseguran que, en caso de que el nuevo fármaco se implantara en un 1% de los 5,2 millones de pacientes potenciales de EEUU -hoy cuenta con limitaciones al tener un coste de 40.000 euros anuales-, dispararía los volúmenes de crecimiento anual de Grifols del 8% al 12% y generaría una demanda de plasma de 213 millones de toneladas en 2019 y unas necesidades de 35 toneladas de inmunoglobulina.

Hay margen para esperar nuevas subidas en Grifols. Después de comenzar el año con algunas dudas en su cotización bursátil, desde principios de abril la compañía se anota un 8,5%, hasta los 29,4 euros a los que cerró este martes. Sin embargo, los expertos consideran que hay margen para esperar nuevos repuntes después de que la empresa de hemoderivados se haya anotado más de un 130% desde principios de 2012. Esta semana los analistas de BPI han revisado sus previsiones sobre la compañía y han elevado su precio objetivo hasta situarlo en los 36,7 euros desde su estimación anterior de 32,4. Esto supondría una revalorización de los títulos de casi un 25% que rompería la barrera de los 30 euros en la que ha chocado en los últimos tiempos el valor y que está sustentada en una mejora del entorno macroeconómico en España, en el crecimiento del beneficio por acción y siempre a la expectativa de avances en los tratamientos para paliar los efectos del alzhéimer.