Renta Corporación sigue su imparable carrera por reducir endeudamiento

Renta Corporación sigue su carrera por reducir su endeudamiento. En los que llevamos de año la inmobiliaria que preside Luis Hernández de Cabanyes ha reducido su deuda en 35 millones, según han señalado fuentes financieras.

La operación se debe a una dación en pago a Banco Santander y Banco de Valencia, en línea con las que el grupo ha estado realizado en el último ejercicio.

Tras esta nueva salida de activos de balance, la deuda de Renta Corporación queda situada en 145 millones, un 19% menos. Tras esta operación todo el crédito a Renta Corporación está vinculado a inmuebles y con vencimiento a ocho años, con lo que ahora este nivel de deuda ya empieza a ser cómodo para la sociedad. Fuentes de la empresa han declinado hacer declaraciones.

Durante el año 2011, el grupo canjeó activos a cambio de reducir su deuda por valor de 117,9 millones, una política que ha continuado durante este año, de manera que se recortan los costes financieros de la compañía.

Mientras tanto, Renta Corporación sigue intentando mantener la actividad a pesar de la difícil situación del mercado inmobiliario, donde la falta de crédito complica que se puedan cerrar operaciones.

300 pisos

En este contexto, en los últimos 18 meses Renta Corporación ha vendido más de 300 pisos e inmuebles, si bien la rentabilidad de las operaciones ha bajado en el nuevo entorno.

Pero además durante este año Renta Corporación ha vendido dos inmuebles en Madrid, en operaciones de más dimensión. El primero en Príncipe de Vergara, 11, por el que ha obtenido 24 millones de un grupo inversor latinoamericano. El segundo ha sido el de Gran Vía, 80 que ha adquirido el grupo Hoteles Chiqui por otros 20 millones.

Hoteles Chiqui es un grupo hotelero del norte de España que tras la rehabilitación que ha aplicado Renta Corporación abrirá un nuevo establecimiento en Madrid.

Esta transacción es un ejemplo del modelo de negocio de Renta Corporación: comprar un activo, en el caso de Gran Vía, 80 negociar con los inquilinos, cambiar el uso de oficina a hotel y colocarlo a otro inversor.

El grupo, que cotiza en bolsa, factura unos 150 millones anuales y está en beneficios, en especial gracias a sus esfuerzos para reestructurar su deuda.