La CNMV admite una reclamación de 340 afectados por el fondo Banif Inmobiliario

La CNMV ha admitido a trámite una reclamación de responsabilidad patrimonial presentada por 340 partícipes del fondo Banif Inmobiliario que acusan al organismo de omitir sus deberes de supervisión y de protección de los inversores en el escándalo por el cierre de este producto. Dicha reclamación no cuantifica el importe total que tendrían derecho a percibir 42.000 partícipes de este fondo, pero sí reclama que reciban el valor liquidativo anterior a la suspensión de los reembolsos.

El supervisor que preside Julio Segura no sólo ha admitido la reclamación sino que ha solicitado una ampliación del plazo inicial de seis meses para resolver la cuestión en otros tres, habida cuenta de la complejidad del asunto y del número de reclamantes. Los reclamantes, agrupados en la asociación Activa, consideran que la CNMV les ha causado un perjuicio patrimonial con su actuación, por lo que debe ser ella la que pague sus pérdidas (y considera responsable solidario a la matriz de Banif, el Banco Santander). 

Un portavoz de la CNMV aseguró que las reclamaciones siempre se admiten a trámite pero que en este caso "no se trata de una reclamación". Asimismo, dijo que este organismo no tiene potestad para exigir responsabilidad patrimonial a la entidad y que este paso no es necesario para acudir a los tribunales, que son los que sí pueden exigir estas responsabilidades.

En cambio, la citada asociación -que preside el abogado Juan Manuel Moreno-Luque- explica que la Ley de Procedimiento Contencioso dispone que se presente una reclamación ante el Ministerio de Economía, que es quien la ha trasladado a la CNMV, que en este caso actúa como juez y parte. Si no les da la razón, entonces acudirá a los tribunales, donde un proceso de este tipo viene a durar alrededor de un año.

El Banif Inmobiliario anunció la suspensión de los reembolsos de participaciones el 4 de marzo de 2009 alegando la imposibilidad de satisfacerlos ya que el estallido de la burbuja inmobiliaria impedía la venta de inmuebles para conseguir la liquidez necesaria. Después de dos años de protestas y demandas judiciales, el banco que preside Emilio Botín accedió en diciembre de 2010 a recomprar las participaciones del fondo, pero con un valor liquidativo estimado en ese momento de 1.210 euros, frente a los 1.500 en que se encontraba en el momento del cierre de los reembolsos, debido a la pérdida de valor de los inmuebles en ese momento.

Esta asociación, que agrupa a unos 700 afectados, sostiene que los partícipes deben recibir esa cifra, que era el valor de sus participaciones cuando se les impidió venderlas. Y considera también que la aquiescencia de la CNMV con la maniobra del Santander le convierte en responsable de este quebranto patrimonial, de ahí que la reclamación se dirija contra ella.