La nueva dimensión de Marc Márquez

La locura de Marc Márquez no tiene fin. Contemporizar o sestear no figuran en el vocabulario del piloto ilerdense de Honda. Se agotan los calificativos para intentar aportar algo nuevo que defina lo que va camino de convertirse en un dominio sin parangón en el motociclismo. Con el triunfo en Indianápolis del pasado domingo, Márquez lograba su décimo triunfo consecutivo del curso. Igualaba así una marca histórica que sólo el gran Giacomo Agostini y el no menos grande, Mick Doohan, fueron capaces de conseguir. El italiano rizó el rizo y arrancó las temporadas 1968, 1969 y 1970 imponiéndose en las diez primeras carreras. Por su parte, en 1997, el australiano acumuló el mismo número de victorias, pero lo hizo desde la cuarta a la 13ª cita del Mundial, no desde el arranque del campeonato.

En Brno, a sus 21 años, el hombre del momento, la sonrisa que contagia y que llena de vida el paddock, tiene la opción de continuar con su inmaculada trayectoria y convertirse en el piloto con más victorias consecutivas en una misma temporada. Una nueva dimensión para el gerifalte del motociclismo.Del mismo modo, en caso de conseguir su undécima victoria, igualaría las victorias en una misma temporada que lograron el propio Agostini en 1972 y Valentino Rossi en 2001, 2002 y 2005. Se quedaría entonces a sólo una del record de Doohan. En 1997, la leyenda ‘aussie’ ganó 12 de los 15 Grandes Premios que conformaban el Mundial. Con un Mundial compuesto ahora por 18 carreras, la tarea se antoja pan comido.

El sábado, tras la jornada de clasificación en el trazado centroeuropeo, todo hace presagiar un nuevo recital del español. El vigente campeón del mundo de MotoGP logró para el crono en 1:55.729, casi un segundo por delante del tiempo marcado por la Ducati del italiano Andrea Dovizioso (1:56.714). Por poner algún pero, pese a subir al podio en sus tres últimas visitas y ganar en 2012 y 2013, el pasado mes de julio se fue al suelo durante los test para probar y evolucionar la la RC213V con la que competirá en el Mundial de 2015. Una caída poco probable atendiendo a la madurez de su pilotaje.

Sus ilustres predecesores se rinden ante la evidencia y se deshacen en elogios con el hombre que tiene en su mano marcar una era, quién sabe si la más brillante, en el deporte de las dos ruedas. Agostini, uno de los miembros de la Academia Laureus, fue el gran culpable de que, el pasado mes de marzo en Kuala Lumpur, Marc recibiera el galardón como Mejor Deportista Revelación del curso tras la conquista de su primera corona en la categoría reina. En declaraciones a la Gazzetta dello Sport, el legendario piloto bresciani le auguraba un futuro espléndido: "Está en el camino correcto para convertirse en uno de los mejores de todos los tiempos: tiene técnica, cabeza, astucia, inteligencia. Para ser un gran campeón no puede faltarte nada".

Por su parte, Mick Doohan no tiene ninguna duda de que el cielo es el único límite para el genio de Cervera. "En su actual estado de forma, va a ganar tal vez otras 10. Ciertamente es el hombre del momento, hace que los demás pilotos parezcan amateurs. Tiene un compañero de equipo en una moto parecida, tiene buenos rivales en otras motos competitivas, pero está pilotando a un nivel diferente a todo el mundo. No hay duda de que hay muchas posibilidades de que vaya a ganar las 18 carreras de este año", reconcía el cinco veces campeón de 500 cc durante la década de los noventa (1994, 1995, 1996, 1997, 1998) a la agencia australiana AAP.

Al margen de seguir pulverizando registros, de lo que nadie duda es que, más tarde o más temprano, Márquez conseguirá su segundo título de MotoGP antes de cumplir los 22 años. Una auténtica barbaridad. Antes de lo que acontezca en la carrera de este domingo, Marc lidera la clasificación del Mundial con 250 puntos, 89 más que su compañero en Honda, Dani Pedrosa, y 93 sobre la Valentino Rossi. Lorenzo, cuarto, deambula en tierra de nadie a 133 puntos. Calculadora en mano, en caso de ganar las cuatro próximas carreras, podría proAdemás, si hace lo mismo en las próximas cuatro carreras, podría proclamarse campeón en el Gran Premio de Aragón que se disputará en el circuito de Motorland (Alcañiz) el próximo 21 de septiembre.

Si Marc consigue lo que todos esperan sería elprimer español en defender el título en lacategoríareina, algo que en su momento no pudieron hacer Álex Crivillé ni Jorge Lorenzo. Además, siendo fiel a su habitual precocidad a la hora de amasar éxitos, sería el más joven en revalidar título, por delante del británico Mike Hailwood, que en 1963 repitiera título de campeón con 23 años y 138 días. Una genialidad que se inició en abril de 2013 cuando se impuso en Austin con 20 años y 63 días, convirtiéndose en el piloto más joven en ganar una carrera en la categoría reina, superando a'Fast' Freddie Spencer, quien en 1983 logró el título de la extinta categoría de 500 cc con 21 años, 8 meses y 12 días.

Ídolo de masas su figura se ha convertido en un icono que trasciende los circuitos más allá de sus incuestionables cualidades como piloto. Lo tiene todo y sólo cabe esperar que la voracidad que le define no mengue en los próximos años. Porque de ganar también se puede cansar uno. Para ello Marc posee una receta sencilla. “Ahora debo mantener la motivación al 100% y seguir trabajando para volver a ganar de nuevo”, reconocía en una entrevista con la revista GQ el pasado mes de febrero.