El exceso de ímpetu le da una nueva lección a Marc Márquez en el circuito de Mugello

Patinó Marc Márquez en la quinta carrera del año de su debut en MotoGP. Tras un fin de semana accidentado, donde saltó literalmente de la moto el sábado para evitar chocar con el muro, el de Cervera penó su inexperiencia en la máxima categoría del motociclismo y abandonó la carrera en Mugello cuando quedaban tan sólo tres vueltas para volver a subir de nuevo al cajón. Su  ímpetu en carrera, que le ha causado más de una pena en su corta carrera, le impidió volver a subir al podio. Un hecho que ha tomado por costumbre en el presente curso, a pesar de ser un novel en la categoría.

Es la séptima caída de la temporada para el piloto de Honda cuando tan sólo se contabilizan cinco carreras de las 18 previstas en el Mundial. El tercer clasificado del Mundial de MotoGp, que con el abandono de hoy se aleja ya a 26 puntos de la cabeza, comandada por Pedrosa, volvía a la carrera donde consiguió su primera victoria como profesional. Era 2010, con las ya extintas motos de 125 cc. Su físico llegaba bastante magullado a la carrera, con un hombro derecho tocado y restos en el rostro que daban buena cuenta de la caída sufrida en la jornada del sábado. Pese a ello, Márquez no se arrugó ni mucho menos.

Tras una arrancada espectacular, Márquez  pasó del sexto al tercer puesto y se pegó a la rueda de Pedrosa, al que adelantaría a falta de siete vueltas. El año pasado, aún en Moto2, Márquez se quedaba por fuera del cajón en Mugello. Acabó quinto, en una carrera donde su moto no respondió tan bien como acostumbraba. “En esa carrera aprendí a calmarme, a conformarme con el mejor resultado posible cuando no se puede hacer más”, declara el novel del Honda. Tal vez porque no tiene nada que perder y avivado por su espectacular arranque de temporada, se permitió arriesgar en busca de coger a Lorenzo. Esta vez le salió rana. Al igual que en Le Mans, donde aprendió a correr bajo la lluvia con estos aparatos de 1000 cc que pilota ahora, Márquez sigue aprendiendo a velocidad de crucero mientras ya se ha ganado un puesto entre los elegidos de la categoría reina.

Lorenzo vuelve a reinar, Rossi cae al asfalto

Celebró con gran energía su triunfo en Mugello Jorge Lorenzo. En un comienzo de temporada donde está encontrando dificultades para seguir la estela de la Honda de Pedrosa y Márquez, una auténtica bala, el balear volvió a saborear la victoria en el circuito italiano. Es la tercera victoria consecutiva que logra el mallorquín en Mugello. Sintiéndose más fuerte en el fin de semana que Pedrosa, no desaprovechó la oportunidad y en la primera curva arrebató la cabeza de carrera al de Honda. Una cabeza que no soltó para volver a subirse de nuevo a lo más alto del cajón en Italia.

Además de Márquez, el otro que besó el asfalto de Mugello fue el ídolo local Valentino Rossi. De forma inexplicable, Álvaro Bautista le cerró el paso cuando todas las motos enfilaban la primera curva. El compañero de Lorenzo abandonaba la carrera en la primera vuelta y llevaba la decepción a los tiffosi, que esperaban disfrutar de nuevo a su gran ídolo en la escudería que el encumbró a los altares del motociclismo.