Es noticia
El Barcelona rescata con ayuda arbitral un punto de su campo maldito
  1. Deportes
  2. Fútbol
la liga se complica para los de luis enrique

El Barcelona rescata con ayuda arbitral un punto de su campo maldito

El equipo azulgrana fue muy inferior a la Real y solo un gol de Messi y un gol mal anulado evitó que fuese peor. Ya son seis puntos los que le lleva el Madrid, que visita el Camp Nou el sábado

Foto:

El Barcelona ve cómo la cuerda de la espada de Damocles está cada vez más fina. Quedan unos hilos y, quién sabe, puede ser que caiga sobre sus cabezas el próximo sábado, cercenando casi todas las posibilidades del equipo de ganar esta Liga Santander. San Sebastián fue, una vez más, una pesadilla para el equipo de Luis Enrique. Ya son siete visitas seguidas sin victoria. De esta, se llevó un empate, y contento puede salir con ese punto, porque lo que se vio en Anoeta fue un partido digno de que los tres puntos se quedasen allí. Y hubiese sido así si no existiese Messi. En eso, la vida sigue igual.

Primeros minutos de partido, el Barcelona tiene una desorganización absoluta y no entiende que la Real, que es un equipo de altísimo nivel, les presione arriba. Ter Stegen, portero de pies de oro, mira a su alrededor pero no encuentra alternativa. Levanta un poco más la vista y envía en largo, confiando en que alguno de sus compañeros de delante pueda hacer la guerra por su cuenta. Sacrilegio, un balón largo desde el portero. El Barcelona puede ganar más o menos, pero ya no hay manera de sostener que la filosofía sigue intacta. El fútbol de toque no aceptaba estas licencias.

Esto no fue un momento concreto, sino un recurso habitual. Porque los azulgrana se vieron ahogados, acogotados por la presión de los de Eusebio, que parecían ser más sobre el terreno de juego o, cuanto menos, estar mucho más enteros. La batalla entre los dos equipos fue ganada por los realistas de la primera a la última posición, banquillos incluidos. Todo menos en el marcador. Un pequeño detalle que es elocuente sobre el dominio local: en la primera media hora de juego los donostiarras llevaban siete saques de esquina botados -siempre sin peligro- por cero de sus ilustres rivales. Porque la Real con pegada se hubiese dado un festín.

Foto: Eusebio, con Luis Enrique en segundo plano, durante la visita de la Real al Camp Nou. (EFE)

En el empate, que en estas multinacionales futbolísticas de hoy en día siempre sabe a derrota, el Barcelona renunció a sus conceptos básicos y ni siquiera encontró la genialidad de sus estrellas para solventar la falta de juego que mostró el equipo. Solo un ramalazo, un pase de Neymar, una carrera de Messi, un gol de un genio, lejos, muy lejos de la sinfónica de otros días.

Por el camino el Barcelona ha perdido el juego. El medio campo, otrora motivo de orgullo, hoy es propio de un equipo anémico y desnortado. Sergio Busquets, que es un enorme futbolista, juega a ser la sombra de lo que fue. Es irrelevante desde hace semanas, ha perdido el control de la situación y ni siquiera se despliega en defensa como lo hacía en otro tiempo. También tiene como lastre a sus especialistas secundarios, porque Andre Gomes no es Iniesta y Rakitic tampoco está en sus mejores tardes. Algo mejoró la cosa Denis Suárez, que entró en la segunda mitad, pero tampoco es que convirtiese el agua en vino.

placeholder
Football Soccer - Real Sociedad v Barcelona - Spanish Liga Santander - Anoeta, San Sebastian, Spain - 27 11 2016 Barcelona's Lionel Messi reacts. REUTERS Vincent West

La defensa transparente

En cuanto a la defensa, quizá por las lesiones, tiene un tono circense que debe dar miedo a los aficionados del Barça. Es significativo que Piqué, que ha pasado semanas fuera por un problema en el tobillo, se diese un golpe en esa misma zona y el equipo prefiriese arriesgar con él hasta el final, aunque en algunas ocasiones, como en el gol de William José, se le viese algo más torpe de lo que acostumbra. Mascherano, que depende de su físico tanto como de su fútbol, también se vio sobrepasado por las circunstancias. Y en las bandas ganaron Carlos Martínez y Yuri, con enorme diferencia.

Foto: Messi, en el acto publicitario (Reuters) Opinión

El equipo que juega notable alto, como dijo la semana anterior Luis Enrique después del penúltimo batacazo, se encontró delante con un rival que ya ha dejado muestras importantes en esta Liga Santander de que es un equipo muy real. Y que si no aspira a Europa es porque no ven lo que vemos el resto. La cosa empieza con Willian y Vela, dos jugadores excelentes que, además, parecen absolutamente implicados en el proyecto. Y desde ahí todos los demás. Como el joven Oyarzabal, que se dio un a paliza tremenda, dejándose los pulmones, en la persecución de la salida del balón del Barça. Consiguieron los de arriba de la Real Sociedad que nunca saliese la pelota limpia, que el inicio de todo empezase en un dislate.

Xabi Prieto, Zurutuza e Illarramendi, todos ellos jugadores para soñar, también demostraron una estructura futbolística superior a los de sus rivales, por más fama que tengan los mediocampistas del Barcelona. Más aún cuando consiguen estar en superioridad gracias a Carlos Martínez y Yuri, incansables proyectándose en el ataque, tomando decisiones siempre buenas y creciendo poco a poco a medida que pasaban los minutos hasta parecer inmensos.

El Barcelona se ha convertido en un grupo de jugadores que dependen de la lucidez de sus tres enormes delanteros. Lo que en otros tiempos era el equipo mejor engrasado, el que más claro tenía los conceptos, es hoy el ejército de Pancho Villa a la espera de refuerzos de los de siempre. La ausencia de fútbol del Barcelona explica parte de este campeonato. Los seis puntos de ventaja del Madrid tienen mucho que ver con la irregularidad manifiesta de los de Luis Enrique. No ha empezado diciembre, pero el próximo sábado el Barça ya tiene una bola de partido en contra. Si el Madrid se lleva los tres puntos del Camp Noy serán nueve de ventaja. Y eso no es baladí.

Ficha técnica

1 - Real Sociedad: Rulli; Carlos Martínez, Iñigo Martínez, Navas, Yuri; Illarramendi, Zurutuza, Xabi Prieto (Canales, min. 71); Oyarzabal (Granero, min 83), Vela y Willian José ( Juanmi, min. 74)

1 - Barcelona: Ter Stegen; Sergio Roberto, Mascherano, Piqué, Alba; Rakitic (Denis Suárez, min. 46), Busquets; André Gomes; Messi, Luis Suárez y Neymar Jr.

Goles: 1-0, min. 53: Willian José. 1-1, min. 59: Messi.

Árbitro: Gil Manzano (Comité Extremeño). Mostró tarjeta amarilla a Carlos Martínez, Zurutuza, Ter Stegen, Mascherano, Denis Suárez y Jordi Alba.

Incidencias: partido de la decimotercera jornada disputado en el estadio de Anoeta ante unos 28.000 espectadores. 

El Barcelona ve cómo la cuerda de la espada de Damocles está cada vez más fina. Quedan unos hilos y, quién sabe, puede ser que caiga sobre sus cabezas el próximo sábado, cercenando casi todas las posibilidades del equipo de ganar esta Liga Santander. San Sebastián fue, una vez más, una pesadilla para el equipo de Luis Enrique. Ya son siete visitas seguidas sin victoria. De esta, se llevó un empate, y contento puede salir con ese punto, porque lo que se vio en Anoeta fue un partido digno de que los tres puntos se quedasen allí. Y hubiese sido así si no existiese Messi. En eso, la vida sigue igual.

Luis Enrique Leo Messi Sergio Busquets Neymar