Víctor Fernández se despide como técnico del Deportivo y le sustituirá Víctor Sánchez

Lo dijo el protagonista en cuestión, prueba de que la decisión estaba tomada. Víctor Fernández sabía que un tropiezo ante el Córdoba podía ser definitivo para su suerte y así fue. El técnico así lo reconoció durante la rueda de prensa posterior al partido. "Es mi último partido teniendo en cuenta lo que me dijo el presidente el lunes. Lo he intentado con todas mis fuerzas", indicó Víctor, destituido oficialmente este miércoles según confirmó el propio club. Víctor Sánchez del Amo, ex jugador del Deportivo de La Coruña, será el sustituto de su tocayo

Víctor Sánchez, así, iniciaría su andadura como primer entrenador, después de haber trabajado en diferentes clubes como asistente. Fue segundo entrenador con Michel y en el Deportivo comenzará una aventura en solitario. Se espera que llegue a la capital gallega en cualquier momento, toda vez que Fernández ya es historia.

"Le deseo lo mejor al Deportivo", dijo el Víctor Fernández, que añadió que "nadie va a conseguir que me vaya con la cabeza agachada de La Coruña. Me voy con una paz interior que nadie me quitará". Y subrayó que espera que "el punto sumado ante el Córdoba sirva para que el equipo se salve. Por lo menos, el Deportivo sigue fuera de la zona de descenso". El entrenador reconoció que "hacía tiempo que no tenía unos sentimientos con los jugadores como ahora en el vestuario".

"El presidente es un buen tío"

"He intentado aguantar y casi he caído porque me han venido tres o cuatro llorando", manifestó el preparador aragonés, quien indicó que en el Deportivo lo ha "tenido muy complicado desde el primer momento". El técnico, que ha tenido cuatro ultimátum, dijo que le han supuesto "una pérdida de energía brutal, un desgaste tremendo, una pelea contra todo".

"Intenté mantenerlo en la interioridad, que los jugadores no supieran absolutamente nada, pero los jugadores llega un momento en que lo saben. La pregunta más frecuente en las ruedas de prensa ha sido sobre mi persona. Les doy las gracias. Yo creo que sabían mucho más en esta ocasión que en las anteriores porque no daban crédito", opinó.

Del presidente, Tino Fernández, dijo que es "muy buen tío" y "tiene una labor por delante que se las trae" por el clima convulso que hay en La Coruña. "No voy a reprocharle nada. Si hay uno que necesita cariño en esta ciudad es el presidente", dijo el entrenador, quien se despidió recordando que desde la directiva, antes del partido, se le "comunicó que tenía que ganar sí o sí" al Córdoba y, al no haberlo hecho, está "expuesto a lo que pueda ocurrir".