Es noticia
El Barcelona se desquicia en Anoeta ante la Real más voraz del curso
  1. Deportes
  2. Fútbol
MALA IMAGEN DEL EQUIPO DE MARTINO

El Barcelona se desquicia en Anoeta ante la Real más voraz del curso

Nada hacía presagiar la salida de pista del Barça en Anoeta. Sin alma, sólo Iniesta y Pedro dieron la cara ante la mejor Real del curso, intensa como nunca

Foto:

Nada hacía presagiar la salida de pista del Barcelona en Anoeta. No era una plaza fácil, pues no había logrado la victoria en las 4 visitas anteriores el equipo. Dibujó la Real el partido soñado por la grada, con ganas de revancha por la contienda en las semifinales de Copa. Sin alma, en Anoeta el Barcelona volvió a ser presa de sus miedos, volviendo a esa imagen de equipo discontinuo, esta vez ni siquiera jugando a rachas, pues sólo la Real tuvo presencia en el partido. Con la victoria del Madrid, el Barça penaliza en un campeonato donde cada derrota supone dos pasos atrás.

Tras salir reforzado de la contienda ante el City, respaldado en su idea del juego, en Anoeta el Barça intentó aplicar la misma fórmula. Tocaba y tocaba el Barça en busca de anestesiar a su rival, revolucionado desde el primer minuto, intenso como pocos le han plantado cara al Barcelona. Sucede que la Real jugó con las pulsaciones varios puntos por encima que las del conjunto de Pellegrini. Con el cuchillo entre los dientes, y el recuerdo de la semifinal de Copa en el ambiente, la grada caldeó Anoeta para enseñarle al equipo cual debía ser la temperatura del encuentro.

Supo leer muy bien la Real el primer acto, fruto quizá del cuarto encuentro del curso ante los azulgranas. Bien pertrechados atrás cuando perdían el balón, manejaban el mismo con tacto, sin rifarlo pero inyectándole el vértigo necesario al juego. El Barça, que de un tiempo a esta parte es menos ambicioso, más pragmático aun siendo reconocible, se desplegaba a partir de la batuta de Iniesta, faro del juego ante la ausencia de Cesc y Xavi.

placeholder

Pese a desplegarse de nuevo a partir del 4-3-3, ausentes Xavi y Fábregas del once, no ganó en profundidad el equipo de Martino. Desconectado Messi, bien vigilado cada vez que entraba en contacto con el balón, ausente Neymar, quizá más afectado por lo relacionado con su fichaje o simplemente sin la condición física óptima, sólo Pedro aparecía en el frente de ataque para agitar a los suyos. Incrustado Song entre los centrales, no atinaba Busquets a darle vida al balón. Con poca fluidez, los azulgranas se atascaban ante la tropa de Arrasate, extra motivados para la cita. Tras varias llegadas, hizo bingo el conjunto donostiarra. Un centro de Canales era enviado a la red por Álex Song en presencia de Elustondo. Entonces apareció Messi, siempre vigilante a la caza del gol aun cuando parece ausente, para poner las tablas en el marcador.

Histérico Martino, reclamando una y otra vez cada acción al colegiado, tuvo que ver la segunda parte desde la grada al ser expulsado en el túnel de vestuarios por Fernández Borbalán. Como en otras ocasiones, el conjunto azulgrana se perdió en el segundo acto, superado por la marabunta que desplegaba la Real a partir de Vela, Griezmann y Canales, incisivos y precisos con el balón, solidarios en el esfuerzo cuando tocaba recuperarlo. Con nervio, la Real asestó dos bofetadas que mandaron a la lona al Barcelona. Primero Griezmann al conectar un preciso pase de Vela. Cinco minutos después, Zurutuza al embocar un pase del propio Griezmann llegando desde segunda línea y rompiendo el fuera de juego que había tirado la defensa.

placeholder

Desquiciado, claudicó el Barcelona en Anoeta. Nunca tuvo el empaque necesario en Anoeta, sin el ritmo ni la velocidad que exigía el duelo ante un rival bravo en el cuerpo a cuerpo y fino con el esférico. Tras el gol, lejos de tirar de fútbol, el equipo azulgrana fue un flan. Sin raza, no tuvo los arrestos necesarios para engancharse de nuevo al encuentro y se sumergió en esas dudas que tantas veces han aflorado cuando no ha logrado domar el encuentro.

No apareció Messi salvó para mantener a flote a los suyos durante apenas 20 minutos. Tampoco Neymar, llamado a agitar a los suyos en un partido que se esperaba como fue, visceral por momentos frente a un equipo que sabe a qué juega y lo ejecuta de manera formidable. Tras superar el bajón de la imagen impotente mostrada en Champions, la Real va ganando registros que la auparon el año pasado a la máxima competición continental de clubes. En San Sebastián, se encontró la Real y se perdió el Barça, que descarriló en un momento de la temporada crítico.

- Ficha técnica:

3 - Real Sociedad: Bravo; Zaldua, Mikel, Iñigo Martínez, José Ángel; Bergara, Elustondo (Ros min. 90), Zurutuza, Canales (Ansotegi, min. 83); Vela y Griezmann (Xabi Prieto, min. 73).

1 - Barcelona: Valdés; Montoya (Alexis, min. 73), Piqué, Bartra, Adriano; Busquets, Iniesta, Song (Fabregas, min. 60); Pedro, Messi y Neymar.

Goles: 1-0, min. 32: Song (p.p.). 1-1, min. 35: Messi. 2-1, min. 53: Griezmann. 3-1, in. 58: Zurutuza.

Árbitro: David Borbalán (Andalucía). Expulsó a Gerardo Martino en el túnel de vestuarios tras finalizar la primera parte. Amonestó a José Ángel, Canales, Busquets, Bartra Piqué.

Incidencias: 30.485 espectadores en el estadio de Anoeta. Fuerte pitada al Barcelona tanto en su salida como entrada a vestuarios en el calentamiento, algo inusual en el estadio donostiarra.

Nada hacía presagiar la salida de pista del Barcelona en Anoeta. No era una plaza fácil, pues no había logrado la victoria en las 4 visitas anteriores el equipo. Dibujó la Real el partido soñado por la grada, con ganas de revancha por la contienda en las semifinales de Copa. Sin alma, en Anoeta el Barcelona volvió a ser presa de sus miedos, volviendo a esa imagen de equipo discontinuo, esta vez ni siquiera jugando a rachas, pues sólo la Real tuvo presencia en el partido. Con la victoria del Madrid, el Barça penaliza en un campeonato donde cada derrota supone dos pasos atrás.

Neymar Leo Messi
El redactor recomienda