Lendoiro claudica y entra en preconcurso de acreedores

Mientras el fútbol profesional va haciendo frente a la deuda contraída con Hacienda y en lo que va de año ya han reducido sus números rojos en 132'9 millones de euros, hay clubes que viven al límite. Sus dirigentes se las ingenian para sobrevivir aferrados a la poltrona presidencial aunque esto signifique estrangular todos los ingresos que puedan recibir esas entidades. Lo que no esperaban era que el Gobierno, con el respaldo del protocolo firmado el pasado mes de abril entre LFP y el Consejo Superior de Deportes, iba a ejecutar todas las garantías de cobro de manera inmediata. Miguel Cardenal lo tiene claro: tolerancia cero, tal y como ha venido anunciando este periódico. Y el fútbol, en muchas ocasiones de la mano de la Liga, va respondiendo. 

El caso más notorio de todos ellos es el Deportivo que lleva con las cuentas embargadas por parte de Hacienda desde hace un año, lo que ha llevado a Augusto César Lendoiro a sobrevivir poco menos que de la caridad de otros clubes en materia de fichajes y de adelantar ingresos de otros años (la pasada temporada vendió los abonos de la presente temporada para poder pagar en enero a los jugadores), así como del seguro de descenso a Segunda que la LFP tiene para todos los equipos que pierden la categoría. El presidente del conjunto gallego habría entrado en preconcurso de acreedores después de que la asesoría jurídica de la entidad presentase la solicitud en los juzgados de A Coruña. Si se la conceden, el Deportivo tendría cuatro meses para negociar con los acreedores y recurrir a un plan de viabilidad que garantice el futuro del club. 

Tal y como informó La Voz de Galicia, Hacienda ha embargado en los últimos días 14 millones de euros en concepto de taquillas, derechos de televisión y pagos de diferentes patrocinadores. El Deportivo reconoce una deuda de 34 millones, aunque la cifra podría llegar a los 75 millones de euros. Es tal la situación del equipo gallego que en el último año Lendoiro dio orden de no vender a ningún jugador ya que los ingresos irían a parar directamente a Hacienda. El caso más llamativo fue el de Guardado al que el presidente gallego se negó a vender pese a saber que un año después se iba a marchar al Valencia con la carta de libertad en la mano. "Para que se lo lleve Hacienda, el Deportivo lo disfruta en el campo", afirmó. Y así sucedió.

La larga historia de una deuda

La deuda del Deportivo arranca en el último lustro. Durante estos años, la situación invitaba a la presentación del concurso de acreedores pero Lendoiro siempre ha dado la espalda a esa opción por el carácter profesional de su puesto de presidente. Entrar en el concurso hubiera significado el adiós al control y al sueldo del 1% del presupuesto (420.000 euros en 2011) que se colocó como remuneración. Ahora, todo hace indicar que el Deportivo no tendrá otro remedio que acudir al concurso de acreedores. No existe otra solución debido a su dantesca situación económica.

Los dirigentes de los equipos ya saben que las palabras de antaño se han convertido en amenazas verdaderas. Los embargos actuales pueden dar paso a recibir la negativa a competir. Así el Atlético de Madrid ha pagado 35 millones de euros de la deuda que tenía (era el equipo que más dinero debía) mientras que otros como el Málaga, UEFA mantiene embargados los ingresos de la Champions, tuvieron que vender el pasado verano a jugadores como Cazorla, Rondon o Mathijsen y tendrán que hacer lo mismo este próximo mercado de invierno con Isco o Monreal para poder hacer frente a la deuda que mantiene con Hacienda. El Sevilla es otro de los equipos con problemas y desde el club ya han reconocido que tendrán que vender a alguna de sus figuras apuntando a Negredo o Navas como principales valores del club. O pagan o son embargados. 

La Agencia Tributaria ha recaudado 330 millones de euros en lo que va de año, de los que 305 son de Primera. Durante este año han llevado a cabo 278 actuaciones de embargo y 212 son de ingresos de taquillas, 40 de derechos audiovisuales, 11 de créditos del dinero de las quinielas, 7 de derechos federativos, 6 de ayudas del descenso y 2 sobre inmuebles.