Es noticia
Massa, mejor ver el vaso medio lleno
  1. Deportes
  2. Fórmula 1
NUEVO TOQUE DE ATENCIÓN DE FERRARI AL BRASILEÑO

Massa, mejor ver el vaso medio lleno

Ocupa el puesto número 14 y conduce el mismo Ferrari que su compañero, el líder del campeonato. La distancia con él es de 139 puntos y,

Foto: Massa, mejor ver el vaso medio lleno
Massa, mejor ver el vaso medio lleno

Ocupa el puesto número 14 y conduce el mismo Ferrari que su compañero, el líder del campeonato. La distancia con él es de 139 puntos y, habiendo pasado hace dos carreras el ecuador de la temporada, aún conserva su puesto de trabajo. Felipe Massa debe ser positivo y optimista ya que su permanencia en la Scuderia todavía depende de él mismo. En otro equipo, donde los resultados primasen sobre cualquier circunstancia, quizás no se le hubiera 'mimado' tanto. Pero Ferrari y sus aficionados miran al brasileño más allá de su pilotaje. Es casi un afecto familiar.

"Creo que Felipe sabe lo que tiene que hacer. Debe maximizar su rendimiento porque necesitamos puntos para intentar atacar la primera posición en el campeonato de constructores y también para restar puntos a los otros pilotos en el campeonato de pilotos". La premisa que esta semana ha publicado Autosport de Stefano Domenicalli es clara y sabida por todo el público. Sin embargo, conviene recordarlo en voz alta, otra vez.

Pese al pobre rendimiento en pista del brasileño en los dos últimos años, el tacto y la paciencia que Maranello está teniendo con Felipe hacen pensar que existe cierta conformidad en el equipo italiano. Fernando Alonso le ha apoyado siempre que ha tenido oportunidad y el mayor toque de atención ha provenido desde la presidencia, aunque siempre manteniendo un margen de confianza. Proteger a Alonso y sumar puntos para el campeonato de constructores son las instrucciones que Luca di Montezemolo ha señalado en público con respecto a su piloto número dos. Algo que ahora ha vuelto a repetir Domenicali.

Diferentes objetivos que su compañero

Nadie espera que gane alguna carrera y, sin embargo, no sería descabellado pensarlo ya que conduce un vehículo que ha cruzado la línea de meta en primer lugar hasta tres veces este campeonato. Los objetivos para Massa no son tan exigentes como los de Alonso. Esta realidad se asume y a estas alturas del año se consideran normales, siendo al único piloto de los 'grandes' al que se le 'perdona' no ganar una prueba. ¿Por qué? Ferrari no usa la calculadora de Helmut Marko y da una gran importancia al trabajo diario de la persona, además de los números. Es una confianza más emocional que racional.

El listón de Ferrari es el mismo que el de rivales como Red Bull o McLaren: ganar ambos campeonatos, de piloto y constructores. Sin embargo, la manera de llegar a ellos y las consecuencias por no conseguirlo pueden diferir. Si Massa estuviese cuajando esta actuación en Red Bull…

Al margen de las carreras de Felipe, Ferrari está satisfecha ya que lidera el campeonato de pilotos con Fernando Alonso. Quién sabe si con otro compañero, el asturiano estaría en esa posición y con 40 puntos de ventaja sobre el segundo. Por eso y bajo la premisa de 'si algo funciona, no lo toques', en Ferrari alargan la esperanza y renuevan la confianza del quinto peor piloto en la clasificación (excluyendo a los de Caterham, Marussia y HRT).

Debe estar contento de saber que aún puede realizar actuaciones como las de Mónaco (sexto) y Gran Bretaña (cuarto) y que su experiencia, tal y como asegura Domenicali, tiene que influir en el desarrollo del F2012: "Hay que mejorar el coche y estoy seguro de que él puede hacer un buen trabajo".

Massa tiene el vaso medio lleno... aunque es consciente de que el crédito no es ilimitado.

Ocupa el puesto número 14 y conduce el mismo Ferrari que su compañero, el líder del campeonato. La distancia con él es de 139 puntos y, habiendo pasado hace dos carreras el ecuador de la temporada, aún conserva su puesto de trabajo. Felipe Massa debe ser positivo y optimista ya que su permanencia en la Scuderia todavía depende de él mismo. En otro equipo, donde los resultados primasen sobre cualquier circunstancia, quizás no se le hubiera 'mimado' tanto. Pero Ferrari y sus aficionados miran al brasileño más allá de su pilotaje. Es casi un afecto familiar.