Vitantonio Liuzzi, un 'pato sentado' en HRT

"Ha sido muy emocionante". Así resumía un miembro de HRT a El Confidencial la sensación tras estos dos días en Jerez. Dos jornadas intensas que han supuesto un ‘renacimiento’ para la escudería española: nueva estructura, nuevo personal, nuevo piloto y nuevo logotipo. Han empezado de cero aunque con un asunto pendiente de resolver del anterior proyecto: Vitantonio Liuzzi. El contrato del italiano finaliza el año que viene pero podría desvincularse esta misma temporada.

Todo ha salido a pedir de boca. El ‘dorado y blanco’ de los nuevos colores del equipo han debutado con buen pie. El contacto de Pedro de la Rosa con el equipo ha sido fluido y todas las sensaciones que desprenden los trabajadores son positivas. En Jerez, han sido la única escudería que no ha estado pendiente de las tablas de tiempos porque, salvo los neumáticos, todos los componentes del monoplaza los ‘jubilaron’ ayer por la tarde. De hecho, sólo ellos han optado por no colocar biombos delante de su box. Los datos recogidos de los neumáticos serán los únicos de los que puedan sacar provecho de cara al nuevo vehículo.

Si en Jerez han renovado su imagen, para Montmeló está previsto que inauguren su nueva ‘motorhome’. Este aspecto no es sólo para la comodidad de pilotos y trabajadores, el ‘motorhome’ significa tener una casa donde dar la bienvenida a empresarios, gente VIP y, en definitiva, posibles clientes. En este espacio se gesta gran parte del futuro de las escuderías y HRT estrenará uno en los próximos entrenamientos.

Y por fin… a la Caja Mágica

Dejando de lado el aspecto deportivo, HRT trabajaba ayer en los despachos en dos direcciones fundamentalmente: cerrar definitivamente su sede y completar su línea de pilotos. En cuanto al emplazamiento, ayer se hizo oficial su acuerdo para trasladarse a la Caja Mágica. El otro aspecto, el de los pilotos ‘secundarios’, es el único más complejo.

Los dos pilotos oficiales son Pedro de la Rosa y Narain Karthikeyan. A partir de ahí, el tercer piloto y otro más de reserva están por decidir. El problema radica en que a Vitantonio Liuzzi le resta un año de contrato y, aunque en el acuerdo vigente no figure que deba realizar kilómetro alguno sobre el coche, sí que especifica que debe cobrar su sueldo (recordemos que Karthikeyan ha traído el dinero de Tata para correr). La situación ideal para HRT sería que un tercer piloto (o tercer piloto más reserva) viniera con el montante suficiente como para pagar el finiquito del italiano y dejar algo en las arcas españolas.

Para los próximos test, además del nuevo ‘motorhome’, si HRT supera los crash-test desvelará su nuevo bólido. Un monoplaza que, como la mayoría de los de la parrilla, “será feo”.