Londres está más cerca para un Real Madrid que abusa del Maccabi

El objetivo para esta temporada en el Real Madrid era estar en la Final Four de Londres y, de momento, los jugadores de Pablo Laso han dado el primer paso para ello. En uno de los grandes clásicos del baloncesto continental, el conjunto blanco borró del mapa al Maccabi de Tel-Aviv gracias a uno de los partidos más completos del equipo madridista en la presente Euroliga. Florentino Pérez, presente en el palco del Palacio de los Deportes, disfrutó de lo lindo de un gran espectáculo, que debe tener su continuación este próximo viernes para acudir a Israel con las espaldas bien cubiertas.

Era noche grande en el Palacio, de esas en las que deben aparecer los jugadores de verdad, las estrellas, y los grandes equipos. En juego, nada más y nada menos que el primer asalto hacia Londres. Y así lo entendió el equipo de Pablo Laso, que comenzó el duelo con un parcial de 5-0, triple de Sergio Llull incluido, lo que hacía presagiar que la metralleta del tiro exterior en el equipo blanco estaba bien engrasada. Sin embargo, por cosas que tiene este equipo, esos altibajos que ni el propio técnico vitoriano entiende, Maccabi se metió en el partido dando a los blancos de su propia medicina, con un Caner-Medley muy atinado desde el 6,75. El Madrid no tenía la intensidad defensiva necesaria para un partido de este nivel, y lo pagó con un parcial de 0-8 que hizo enmudecer al Palacio.

Con nueve arriba para los israelíes se llegaba al final de un primer cuarto decepcionante para la parroquia madridista, que entendió que el equipo necesitaba de su ayuda. Así, con el ánimo desde la grada y, sobre todo, con el grado de intensidad en defensa que le metió Felipe Reyes, el encuentro dio un giro de 180 grados. Si a eso añadimos que el tiro desde el perímetro empezó a carburar de la manera deseada, la apoteosis era evidente en el graderío. El parcial en este segundo período no tiene desperdicio, un 24-4 que sonrojaría a cualquiera, más a un David Blatt que no es nuevo en esto.

Las cosas empezaban a ponerse en su sitio. El camino hacia Londres, algo a lo que aludía la peña Berserkers en el inicio del partido con un enorme mosaico, parecía allanarse. Y es que cuando el cuadro merengue se enchufa y juega con la concentración necesaria en las dos canastas, se convierte en un equipo muy difícil de batir, tal y como se empeñó en demostrar en la tarde-noche de este miércoles.

Despegue definitivo

Maccabi necesitaba una reacción. El 38-27 que reflejaba el marcador al descanso y, fundamentalmente, las sensaciones dentro de la pista eran muy favorables el Real Madrid. Los de Blatt lo intentaron, pero los de Pablo Laso tienen muy claro que no quieren dejar escapar esta gran oportunidad de volver a una Final Four y, por qué no, levantar esa ansiada novena Copa de Europa, título que no ganan los blancos desde 1995. Ahí es nada.

Por eso, el torbellino del segundo cuarto tuvo su continuación en el arranque del tercer capítulo de una película que pintaba final feliz para el conjunto español. Si Rudy y Felipe se habían convertido en los grandes baluartes del Madrid en el primer período, Mirotic fue quien tomó la batuta en este momento del duelo. Pero para lo bueno y para lo malo. Dos canastas del hispano-montenegrino elevaron la ventaja blanca hasta los 14 puntos (43-29), pero en una acción propia de la tensión de un duelo de cuartos de la Euroliga, el ala-pívot cometió un error infantil al protestar airadamente una falta. Las consecuencias, una técnica que cabreó de manera espectacular a su técnico.

Ahora bien, la noche no se iba a torcer por una cosa tan nimia como ésta. El Madrid estaba de dulce, todo el mundo anotaba y, lo que es más importante, todo el mundo defendía. El público disfrutaba de una gran noche europea a medida que la ventaja crecía por encima de los veinte puntos y ya nos adentrábamos en el último período. El primer punto de la eliminatoria de cuartos tenía dueño, un Real Madrid que jugando a este nivel debe dejar en la cuneta al Maccabi. Ahora bien, como este equipo es como el Guadiana, habrá que ver qué versión aparece este próximo viernes. Una segunda victoria aseguraría buena parte del billete para estar en Londres el próximo 10 de mayo.

Ficha técnica

79.- Real Madrid (14+24+21+20): Rudy (15), Suárez (4), Mirotic (14), Begic (5) y Llull (8) -quinteto inicial-, Hettsheimeir (2), Rodríguez (10), Slaughter (5), Reyes (8), Draper y Carroll (8).

53.- Maccabi Tel Aviv (23+4+16+10): James (9), Smith (7), Hickman (9), Caner-Medley (8) y Ohayon (4) -quinteto inicial-, Logan (2), Eliyahu (2), Roth (1), Pnini (1), Planinic (5) y Landesberg (5).

Árbitros: Recep Ankarali (TUR), Matej Boltauzer (SLO) y Robert Lottermoser (ALE). Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente al primer choque del 'playoff' de cuartos de final de la Euroliga disputado en el Palacio de Deportes de Madrid ante 8.076 espectadores.