Es noticia
Don Felipe pide 'cara a cara' el voto para Madrid a los miembros del COI
  1. Deportes
EL PRÍNCIPE HACE 'LOBBY' ENTRE LAS CASAS REALES

Don Felipe pide 'cara a cara' el voto para Madrid a los miembros del COI

Los diez votos relacionados con las casas reales pueden resultar decisivos y el Príncipe Felipe ha asumido ese objetivo en la capital argentina

Foto: El Príncipe Felipe y Doña Letizia, ayer, a las puertas del teatro Colón (Efe)
El Príncipe Felipe y Doña Letizia, ayer, a las puertas del teatro Colón (Efe)

Uno llega a Buenos Aires con la creencia de que la palabra que más va a escuchar tendrá un toque porteño, con esos acentos interminables que alargan el sonido de las palabras hasta el infinito. Equivocación. Por la capital de Argentina no se pronuncia otro vocablo que el de lobby, con acento anglosajón y admitido por la Academia, por cierto. Pues bien, eso es lo que ha hecho el Príncipe Felipe desde que el pasado lunes se puso la corbata roja de Madrid 2020, lo que hizo anoche en el bonaerense teatro Colón y lo que seguirá haciendo hasta el momento de la presentación de hoy. Los diez votos relacionados con las casas reales, por ejemplo, pueden resultar decisivos y él ha asumido ese objetivo.

Dicen que la capital de España, en su búsqueda de los Juegos en 2012 y 2016, falló en eso del lobby. Lección aprendida, pues el heredero de la Corona ha mantenido no menos de 20 reuniones, comidas, charlas o cafés de esos que dejas en la taza y siempre con Alejandro Blanco a su lado. Don Felipe cerró el círculo anoche con su presencia en el Colón, mostrándose a todo el movimiento olímpico internacional y pidiendo el voto a todo aquel que se cruzaba en su camino. A su lado, la Princesa Letizia, que apareció en la tarde del jueves por Buenos Aires, pero que no se dejó ver hasta la cita del mítico teatro. No obstante, se esperaba a la esposa de Don Felipe en el cóctel que dio ayer tarde (hora española) la candidatura, pero Doña Letizia prefirió retirarse a sus aposentos. El Príncipe tampoco se dejó ver, desluciendo el acto.

Relevo del Rey Don Juan Carlos

El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, la princesa japonesa Akiko de Mikasa y el Príncipe Felipe, cada uno a su manera, han puesto todo su empeño en acercar el triunfo a sus candidaturas. Dicen los analistas, esos que saben todo y no aciertan nada, que Don Felipe, en la terna, gana por goleada, aunque ninguno de ellos acierta a contar los motivos. Lo que parece claro es que, se lleve Madrid los Juegos o no, el Príncipe ha tomado el relevo del Rey Don Juan Carlos, al menos en este tipo de ceremonias.

PRINCESA DE JAPÓN VISITA EL JARDÍN JAPONÉS EN BUENOS AIRESEl perder unos Juegos es mucho más sencillo. Una respuesta desacertada en una rueda de Prensa, una exposición mal hecha o la aparición de alguien como Alberto de Mónaco en el momento más inoportuno pueden dar al traste con el trabajo de meses. Pues bien, para evitar este tipo de situaciones, Alejandro Blanco pidió dos favores muy concretos para la ocasión.

El primero hacía referencia a la poca presencia política, rota por José Igancio Wert en la rueda de prensa matinal de la candidatura. El ministro tuvo que contestar preguntas incómodas, como los recortes económicos a los deportistas o el conflicto de Gibraltar. Salió bien del paso, pero su fácil verbo puso a más de uno de los nervios ante lo que pudiera decir a 24 horas de la decisión definitiva. El segundo tenía relación con que los deportistas españoles que acompañan a la candidatura y tienen proyección internacional, como Pau Gasol, fuesen la imagen de la delegación española, como así ha sido.

Tokio, el último obstáculo para el sueño español

Tokio se ha convertido en el rival a batir. La euforia que se ha apoderado de la candidatura de Madrid tiene como último obstáculo el proyecto de la capital japonesa. Estambul parece condenada. El dopaje, las revuelta en la Taksim, la sombra de los amaños en el fútbol y alguna que otra decisión como la de separar las piscinas para hombres y mujeres, parece que han condenado el poder económico y la mezcla de culturas que representa la ciudad turca.

Madrid se siente ganadora y no por el informe técnico del COI, que señala a la capital de España como la mejor candidata. La confianza en el trabajo realizado durante la vuelta al mundo hecha por Alejandro Blanco en busca de votos, la austeridad de la candidatura y el último esfuerzo hecho sobre el terreno con el príncipe Felipe desde el pasado lunes en Buenos Aires, han llevado a los responsables de la candidatura a pensar en que el éxito es posible. Se ha preparado todo con celo. Madrid 2020 fue la primera candidatura en aparecer por la capital de Argentina y está convencida que será la última en salir y, además, en hacerlo con los anillos olímpicos en la bodega del avión.

Hablan de 50 votos o por lo menos de promesas hechas, pero el optimismo va más allá. Se basa en lo sucedido hace cuatro años en Copenhague. En aquella ocasión, Madrid pasó por encima de Tokio, que quedó relegada tras la segunda votación con apenas 20 votos frente a los 29 de Madrid. La candidatura japonesa apenas ha cambiado su planteamiento.

Tokio ha visto como ha aumentado el apoyo popular, el gran inconveniente que tuvo hace cuatro años. Ahora alcanza el 70%, lejos el 91% logrado por Madrid. Por otra parte, Fukushima y lo que los mismos periodistas japoneses reconocen como error (callar y silenciar lo que realmente ocurre en la central nuclear) juega en su contra. Los 800 periodistas llegados desde Japón hasta Buenos Aires dan color e intensidad a las horas previas. Multiplican por cuatro a la prensa española y en otro tanto a los periodistas llegados de Estambul.

La candidatura turca se ha visto sorprendida por varios factores y algunos sí son achacables a su manera de actuar. La fiebre por el éxito ha llevado al deporte en Turquía a subirse al complicado carro del dopaje. Hasta 52 deportistas han sido suspendidos en los últimos meses por este motivo, lo que pone en duda el deporte en el país y hará que la circunstancia de dar los Juegos a dos continentes en una sola cita pueda con la realidad.

Mientras, la candidatura de Madrid ha aprendido de errores del pasado, restando protagonismo a los políticos, tal y como desea el COI. La labor hecha por Alejandro Blanco, sacando adelante una candidatura en el peor momento posible económico, ha conseguido desterrar el fantasma de un país en ruinas que desde muchos lugares del mundo han pretendido hacer ver. Madrid 2020 ha sido realista desde el primer momento. Ha olvidado delirios de grandeza del pasado y ha hecho una candidatura acorde a los tiempos que corren, lo que ha válido para Jacques Rogge diga: "Madrid está preparada".

Uno llega a Buenos Aires con la creencia de que la palabra que más va a escuchar tendrá un toque porteño, con esos acentos interminables que alargan el sonido de las palabras hasta el infinito. Equivocación. Por la capital de Argentina no se pronuncia otro vocablo que el de lobby, con acento anglosajón y admitido por la Academia, por cierto. Pues bien, eso es lo que ha hecho el Príncipe Felipe desde que el pasado lunes se puso la corbata roja de Madrid 2020, lo que hizo anoche en el bonaerense teatro Colón y lo que seguirá haciendo hasta el momento de la presentación de hoy. Los diez votos relacionados con las casas reales, por ejemplo, pueden resultar decisivos y él ha asumido ese objetivo.

Dicen que la capital de España, en su búsqueda de los Juegos en 2012 y 2016, falló en eso del lobby. Lección aprendida, pues el heredero de la Corona ha mantenido no menos de 20 reuniones, comidas, charlas o cafés de esos que dejas en la taza y siempre con Alejandro Blanco a su lado. Don Felipe cerró el círculo anoche con su presencia en el Colón, mostrándose a todo el movimiento olímpico internacional y pidiendo el voto a todo aquel que se cruzaba en su camino. A su lado, la Princesa Letizia, que apareció en la tarde del jueves por Buenos Aires, pero que no se dejó ver hasta la cita del mítico teatro. No obstante, se esperaba a la esposa de Don Felipe en el cóctel que dio ayer tarde (hora española) la candidatura, pero Doña Letizia prefirió retirarse a sus aposentos. El Príncipe tampoco se dejó ver, desluciendo el acto.

Juegos Olímpicos Rey Don Juan Carlos Juan Rosell
El redactor recomienda