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Los profesionales de los museos dan la voz de alarma sobre su precariedad
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UNO DE CADA DOS CREE QUE ES SU PRINCIPAL PROBLEMA Y UN 80% PIENSA QUE NO MEJORARÁ

Los profesionales de los museos dan la voz de alarma sobre su precariedad

Los trabajadores de los museos españoles lo ven muy negro. Más del 80% de ellos no tiene expectativas de mejorar en su puesto de trabajo ni cree

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Los profesionales de los museos dan la voz de alarma sobre su precariedad

Los trabajadores de los museos españoles lo ven muy negro. Más del 80% de ellos no tiene expectativas de mejorar en su puesto de trabajo ni cree que verán mejoradas sus responsabilidades o su remuneración durante los próximos tres años. Uno de cada dos, además, cree que el principal problema que tienen los museos de España está en las condiciones laborales de sus profesionales, cuya mejora sitúan como prioridad, seguida solo del aumento de los recursos de los centros y de la mejora del reconocimiento social. 

Son algunas de las contundentes estadísticas publicadas en Los profesionales de los museos. Un estudio sobre el sector en España, un informe publicado este lunes por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte y que analiza por primera vez la situación de un gremio, el de los museos, cuya insatisfacción queda muchas veces eclipsada por los mármoles de las pinacotecas y el brillo de sus estrellas. Un ejemplo: el 10,1 % de los 1.200 encuestados en el estudio se encuentran en situación de desempleo. Y otro ejemplo: de los que sí mantienen un puesto de trabajo, el nivel de satisfacción laboral es menor a medida que desciende la categoría. 

El principal problema de los profesionales de los museos españoles tiene que ver, según ellos, con el ajuste de su formación a su categoría profesional. Cinco de cada diez técnicos y siete de cada diez auxiliares piensan que las funciones que desempeñan no se ajustan a su formación y su categoría profesional.

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Los profesionales, según el texto, estiman que adecuar la categoría y remuneración que reciben mejoraría mucho su situación. El informe destaca algunas de las opiniones expresadas al respecto: “Están ocupando puestos de secretaría, becarios y administrativos teniendo un currículum y una experiencia que no se valora”. De igual forma, piden equiparar la categoría con la de otros profesionales: “A menudo los técnicos en patrimonio cultural no están equiparados en responsabilidad y sueldo a técnicos de urbanismo, medio ambiente... porque no se percibe por la población en general la importancia de este sector”.

La mayoría son empleados públicos

El pesimismo de los trabajadores de los museos cala menos entre los asalariados de instituciones privadas, aunque son una minoría, ya que el 91% de los profesionales trabajan en museos de titularidad pública. El aumento de la promoción, la movilidad y la citada adecuación de categorías son las principales razones estimadas para mejorar su situación laboral, seguidas por otros temas como la introducción de incentivos o de otros elementos de motivación, como el reconocimiento o la existencia de una entidad que les represente y defienda sus intereses.

Un término tan en boga hoy día como transparencia en la selección y acceso a los puestos de trabajo aparece como la cuarta preocupación laboral de los trabajadores de los museos, cuya formación, apunta el informe, consiste en Licenciatura en Geografía e Historia (65,2%), principalmente con especialidad en Historia del Arte (33,7%) o Historia (20,9%). Uno de los encuestados considera que “habría que regirse por criterios empresariales, los puestos de trabajo no son vitalicios”, y denuncia que “hay directivos que lo hacen mal y siguen siéndolo. Deben escogerse los perfiles adecuados para llegar a los objetivos. Yo no he podido escoger nunca a nadie de mi equipo. Todo son reciclajes”.

Menos encuentro hay sobre cómo solucionar esas desigualdades. Por un lado, se pide que el acceso a los puestos técnicos y directivos se realice “por sus méritos curriculares (formación y experiencia) en vez de por oposición”, mientras que otras opiniones consideran que la mejor vía son las oposiciones (para los museos de la Administración), ya que otras formas de acceso “no garantizan la concurrencia e igualdad”.

El aumento de la remuneración aparece como la quinta petición de los profesionales de los museos en el informe. Más de la mitad (55,0%) reciben de salario bruto anual entre 18.001 € y 36.000 €. Algo más cobran los trabajadores en fundaciones, con sueldos superiores a los 45.000 € en el 29,8% de los casos. Pero también hay extremos: en los museos pequeños se incrementan las remuneraciones inferiores a 18.000 € (31,1%), mientras que en los museos con más de 100 trabajadores crece la proporción de profesionales con sueldos brutos anuales superiores a los 63.000 € (8,7%).

Más recursos y reconocimiento social y político

El segundo y tercer gran asunto que debe atenderse necesariamente para los encuestados, procedentes de cerca de 300 instituciones museísticas, es la mejora (43,7 %) y el aumento (17,8) de los recursos. Una de las opiniones expresa que “la sociedad avanza a niveles extraordinarios y no podemos quedarnos anclados en el pasado, hay que evolucionar”. Igualmente, en términos de mejora de recursos, piensan que debería evitarse contar con no profesionales para realizar tareas que han de ser desarrolladas por profesionales.

Otra parte importante de los profesionales de los museos (11,8 %) proponen la potenciación del valor social de los museos y la mejora de su comunicación como aspectos que mejorarían su situación.

España cuenta hoy con más de 1.550 museos y colecciones museográficas, instituciones en las que trabajan 14.784 profesionales según la encuesta de 2010 de museos y colecciones museográficas del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Si atendemos al tipo de titularidad, el 67,5% de ellos son museos públicos, un 30,4% pertenece al ámbito privado y un 2,1% son de titularidad mixta.

Los trabajadores de los museos españoles lo ven muy negro. Más del 80% de ellos no tiene expectativas de mejorar en su puesto de trabajo ni cree que verán mejoradas sus responsabilidades o su remuneración durante los próximos tres años. Uno de cada dos, además, cree que el principal problema que tienen los museos de España está en las condiciones laborales de sus profesionales, cuya mejora sitúan como prioridad, seguida solo del aumento de los recursos de los centros y de la mejora del reconocimiento social.