Cuando ella está encima: aprende a sacarle todo el partido

Las mujeres ya no esperan a que el hombre las llame, ya no tienen reparos a lanzarse, a pedir lo que les gusta… Los tiempos cambian, y ahora ellas quieren estar encima.

Fuera tabúes: a la mayoría de los hombres les gusta una mujer activa en la cama. Lo mejor que se puede hacer en una relación sexual es aprender a practicar este intercambio de papeles, de esta forma la sexualidad se convierte en algo más libre y menos estereotipado para la pareja. Así que deja de lado el misionero y prueba a que ella lleve la voz cantante: que controle el ritmo, el movimiento y la profundidad de la penetración.

No hay técnica más visual. Deja ver lo que otras posturas esconden: la cara, los ojos, sus pechos... Un panorama a buen seguro estimulante

La posición 'girl on top' o 'cowgirl' es orgásmica, sugestiva, motivadora, orgásmica (¿lo habíamos comentado ya?), y por eso es de las más demandas en la cama. Es una postura que facilita mucho la intimidad porque permite mirarse a los ojos, tocarse casi todo el cuerpo y mirar el orgasmo del otro en sus gestos y movimientos. Además, a ellas no solo les permite alcanzar antes los orgasmos, sino que se sentirán (y se verán) como diosas. No hay técnica más visual: deja ver lo que otras posturas esconden. La cara, los ojos, sus pechos: un panorama a buen seguro estimulante.

Paso a paso

Si hay mujeres leyendo esto y no saben bien cómo ponerse, pueden seguir los consejos de 'Cosmopolitan', la biblia en cuanto a posturas se refiere: “Haz que el hombre se acueste sobre su espalda y pon tus rodillas a los dos lados de su cadera. Comienza acariciando con los dedos su cuerpo hasta llegar a su miembro. Luego, con una mano sobre la cama o su pecho para sostenerte, sostén la base de su pene con la otra mano y baja lentamente sobre él”.

“Empieza a moverte de arriba a abajo para construir el clímax. También puedes descansar sobre su torso y sensualmente moverte en círculos para estimular el clítoris. Pero solo por que estés en el asiento del conductor no significa que tenga que hacer todo el trabajo: haz que envuelva tus manos alrededor de la cadera para que ayude al movimiento”.

Para una mayor excitación, los expertos recomiendan hacer movimientos circulares con las caderas para estimular el clítoris

Así es: al hombre le permite disponer de la libertad de acariciar el cuerpo de la mujer con sus dos manos. Puede agarrar sus caderas y guiarla para alcanzar el ritmo que más le estimule o con el que mejor controle la excitación. Si quiere o si está cansado, el hombre puede adoptar un papel menos colaborativo y abandonárse al ritmo marcado por su pareja.

Ellas hacen todo (o casi todo) el trabajo

Asimismo, los terapeutas sexuales aconsejan esta postura cuando hay problemas de eyaculación precoz masculina, puesto que permite que el hombre esté más atento a las señales de su cuerpo y, de darse el caso, avise la mujer para que pare o cambie el ritmo con el fin de controlar sus orgasmos.

Para la mujer, el control que otorga esta postura es una delicia. De esta forma, se evita el dolor coital cuando el pene entra demasiado: ¿quién mejor para controlar el nivel? Hay que tener en cuenta que quizá sea una de las posturas que más resistencia física (de ellas) requiere. Por ello, lo más fácil es tener un punto de apoyo al inclinar el cuerpo hacia atrás y colocar las manos sobre la cama. Para una mayor excitación, los expertos recomiendan hacer movimientos circulares con las caderas para estimular el clítoris.

Pero, cuidado. Por lo general solemos olvidar que hacer el amor tiene sus riesgos. No nos referimos a coger una ETS, sino a fracturas de pene que, aunque no sean habituales, ocurren. Según una investigación publicada en 'Advances in Urology', la postura en la que la mujer cabalga al hombre es la más peligrosa. Debido a que el peso del cuerpo femenino descasa sobre el miembro masculino, se puede producir el aplastamiento. Sí, pasa, pero no es común. Tenlo en mente, pero, sobre todo, disfruta.