El "sonado" error garrafal de Gonzalo Miró en 'Pasapalabra': "Menos mal que he podido resarcirme"

Divertido momento el protagonizado este lunes, 1 de abril, por Gonzalo Miró en Pasapalabra. El popular colaborador de espacios como Espejo público, Más vale tarde o La Roca es estos días uno de los famosos que ayudan a los concursantes del espacio que presenta Roberto Leal en Antena 3 a conseguir segundos de cara a la lucha por el bote, aunque su participación no ha estado exenta de alguna que otra metedura de pata importante.

El joven aterrizó con buen pie en el formato, consiguiendo varios aciertos clave en el transcurso de las diferentes pruebas, pero fue llegar a Palabras cruzadas y atravesársele un poco el reto: en él, cada equipo tiene que unir el inicio de una palabra con su final, siempre a partir de un tema y una definición dada. En el caso del equipo azul se trataba de encontrar el sonido que hacen diferentes animales.

La encargada de abrir la prueba fue María Hervás, quien no tardó en tropezar. Óscar Díaz sí acertó algunas de las palabras, pero un error puso la pelota en el tejado de Gonzalo. Roberto le leía la definición, para la cual todavía tenía medio panel por delante: "Cantar de la rana o el sapo".

Tras unos segundos de duda, Miró apostaba por componer la palabra "cacarear". El presentador le hacía ver que su respuesta no era correcta, pero Gonzalo ya se había dado cuenta de su error nada más pronunciar la palabra. Su cara lo decía todo por haber ofrecido una respuesta obviamente fallida, puesto que ese era el ruido de la gallina o el gallo. "Joder, macho", le escuchaba lamentarse, casi entre murmullos, por su torpeza.

Afortunadamente para él, el turno le volvía a llegar solo unos segundos después, pudiendo resarcirse de su error: le llegaba exactamente la misma definición, y en esta ocasión sí respondía "croar". Y no solo eso, sino que además acertaba las dos palabras restantes, por lo que en última instancia era el artífice de la resolución del panel.

Miró lo celebraba a pleno pulmón, desquitándose así la espinita de su fallo: "Menos mal que me has dado la oportunidad de resarcirme, porque cuando he soltado que el sapo cacareaba me he dicho 'fenómeno, crack", reconocía entre risas, consciente del sonado error que había cometido.