Jonan Wiergo, entre lágrimas, amenaza con abandonar 'Bailando con las estrellas' tras un severo rapapolvo

Semana complicada para Jonan Wiergo en Bailando con las estrellas. Tras no entender algunos detalles de la valoración de la entrega anterior, el influencer se enfocó en quitarse sus inseguridades de la cabeza y realizar, junto a David Díaz, el mejor número de salsa que le fuese posible. La pareja ofreció un show decente, pero que no estuvo al nivel, según los expertos.

"Creo que es la salsa más loca que he visto en toda mi vida", opinaba Boris Izaguirre, mientras que Blanca Li asumió que se trata de un estilo "difícil" por su "ritmo rápido y que requiere coordinación": "Es normal que cueste. Aun así, ha habido varios momentos que me han sorprendido". El concursante reconoció que, también en los ensayos de esta semana, se había "autoboicoteado": "Sabía que me iba a perder en el baile. He entrado sabiendo que lo iba a hacer mal".

Sin embargo, estas consideraciones han sido positivas en comparación con las de Julia Gómez Cora: "Jonan, he sufrido por ti. Pensé que ibas a abandonar, y esto feliz, porque nunca hay que abandonar [...] Lo que hacen tus compañeros que quieren ganar es cerrar la boca y ensayar. Concéntrate en cerrar la boca y trabajar un poco más".

Entonces, era el compañero de Wiergo el que no se podía morder la lengua: "No estoy absolutamente nada de acuerdo. Está trabajando como el que más. Ha habido algún fallo, evidentemente. He intentado arriesgar muchísimo, cambiando el rol de hombre y mujer. Sabéis que eso en salsa es muy difícil. En cuestión de trabajo, no te puedo dar la razón".

"Podría haber sido peor", señaló Jesús Vázquez, cuando los jueces hicieron públicas sus notas para el exparticipante de Supervivientes. Recibió un 8 de Boris, un 6 de Blanca, un 5 de Julia, un 6 de Gorka Márquez y un 8 de Antonia Dell'Atte, es decir, un total de 33 puntos. Con todo y con eso, Jonan no pudo evitar echarse a llorar: "Me da rabia porque en los totales estamos de cachondeo, pero trabajamos muy heavy. Compagino esto con mis empresas, tengo presión por muchas cosas. Esta semana me ha costado mucho".

Las cosas se ponían serias tras uno de los cortes publicitarios, tal y como explicó el presentador de Telecinco: "Durante la publicidad, he subido a mi camerino y me he encontrado con Jonan en el pasillo. Estaba con Lola, la coreógrafa. Quiere irse a su casa y estamos intentando convencerlo para que se quede hasta el final de la gala, pero está muy, muy, muy, muy afectado. Él sabe que lo ha hecho mal". Afortunadamente, hacia el final del programa, Wiergo recapacitaba y optaba por continuar en el concurso.