Susanna Griso se lleva las manos a la cabeza por la opinión de Paloma Zorrilla sobre el cartel de la Semana Santa de Sevilla

El cartel promocional de la Semana Santa de Sevilla continúa levantando polvareda. Desde que este fin de semana se hiciese público se ha armado mucho revuelo en las redes sociales, principalmente por aquellos que consideran que sexualiza la imagen de Cristo, yendo incluso más allá al asegurar que se trata de un retrato homosexual del hijo de Dios.

El autor del mismo intervino este lunes, 29 de enero, para dar la cara en Espejo público, una conexión donde le quiso quitar hierro al asunto y poner en valor la excelente promoción que su cartel está haciendo sobre la Semana Santa. Tras su intervención, Susanna Griso quiso conocer la opinión de sus colaboradores sobre la controversia, con Samanta Villar siendo la más rotunda en su posicionamiento: "Cristo siempre ha tenido esta manera de girar la cadera que para muchas personas era amanerada, esto no es nada nuevo, pero que este es un Cristo que está buenorro, lo admitimos", comenzó poniendo de manifiesto con humor.

Acto seguido, la periodista se puso algo más seria en su análisis: "El problema aquí es que este cartel les despierta instintos sexuales y no quieren sentir eso ante esta imagen, ¡pero que se revisen!", sentenció con contundencia.

En el polo opuesto se situó Paloma Zorrilla, quien intervenía desde su casa para incendiar la tertulia: "Este cartel no me gusta nada. Me parece una caricatura, una ofensa a los sentimientos religiosos. Este señor ha querido crear polémica porque es la mejor forma de que se le conozca y ponerse en el candelero. Creo que el arte es otra cosa y la religión tiene que despertar piedad. Hemos visto muchísimas imágenes de Cristo completamente distintas".

Precisamente sobre el Cristo de la Piedad de Miguel Ángel le preguntaba Griso, cuestionándole si tampoco era una representación que le gustase, ya que compartían muchas características. Pero la invitada se salía completamente por la tangente en su dura respuesta: "Yo respeto mucho al artista, pero a mí me parece que esto está muy bien, muy acertado, pero para ponerla en la portada de la revista Shangay o Zero", concluyó con vehemencia, entendiendo, por tanto, que encajaba más en una revista de temática LGTBIQ+ que en una de las semanas grandes de Sevilla.

"¡Ay, por Dios! ¡Ay, Dios mío!", soltaba Susanna nada más escuchar a su colaboradora, llevándose las manos a la cabeza. Soto Ivars intervenía para solicitar que esta le explicase por qué considera gay esta imagen, pero lamentablemente la conexión fallaba, por lo que todo el mundo se quedaba con las ganas de escuchar, y rebatir, su taxativa opinión. El programa tampoco tenía mucho más tiempo para esta cuestión, pero todos sus colaboradores habían cerrado filas con el artista y puesto en valor su trabajo. "Dios ha obrado y le ha cerrado la conexión", bromeaba Miquel Valls cerrando este asunto.