La dura reflexión de Mercedes Milá sobre lo que hay detrás del muñeco de Pedro Sánchez apaleado en Ferraz

El apaleamiento a un muñeco que simulaba ser Pedro Sánchez ahorcado en la madrugada del 31 de diciembre continúa en la picota, tanto por la declaración en comisaría del convocante del acto como por las críticas que continúan sucediéndose. La última, la de la presentadora Mercedes Milá a través de las redes sociales, donde ha querido realizar su particular análisis de la crispada situación política.

"Han salido muchas fotos de la Nochevieja en Ferraz, pero a mí se me ha pegado esta en la memoria, y sobre ella quiero escribir alguna cosa que, a mí, me parece importante", comienza escribiendo la comunicadora, adjuntando una instantánea en la que se ve a un joven apaleando al citado muñeco como si de una piñata se tratase: "Este hombre joven y con pinta de ser una persona formada y educada perdió el control de su cerebro el 31 de diciembre", asevera.

"Si acerco la imagen puedo llegar a juzgarlo guapo, atractivo, con buena facha. Su brazo derecho podría estar haciendo un golpe de tenis, un smash e incluso darle bien a la pelota, pero no lo conseguirá porque el odio ha carcomido sus entrañas. Ese odio que como un virus incurable ha infectado a personas que jamás pensaron llegar a pegar con saña a ese muñeco ahorcado que hizo las veces de una piñata la pasada Nochevieja en Madrid", prosigue escribiendo la conductora de No sé de qué me hablas en TVE.

Acto seguido, Mercedes pone el foco en la figura de Sánchez, ensalzando la institucionalidad, la importancia, de su cargo al frente del Ejecutivo: "Pegaban para derribar y quemar al presidente del Gobierno de España, mi presidente, nuestro presidente, su presidente, por mucho que no quieran aceptarlo".

Por último, el rostro de la cadena público habla del papel de la policía en estos altercados: "También hubo risas junto al odio, hubo banderas que ya consideran suyas, hubo uvas y no parece que la policía se esmerara para detener a tantos cafres. Todavía puedo recordar cómo eran los grises en aquellas manifestaciones del franquismo; dónde acababan los detenidos y cómo eran invariablemente torturados. En la calle Ferraz no pasó nada de eso.

"En la calle Ferraz el odio más destructivo creyó que podría con un país que, como dice Fernando Fernán Gómez, el maestro de pueblo en esa película sublime de José Luis Cuerda La Lengua de las Mariposas, 'si conseguimos que una generación, una sola generación, crezca libre en España, ya nadie les podrá arrancar nunca la libertad", argumenta Milá, quien concluye su texto con un rotundo "y para cada uno y una que se empeñan en hacernos tanto daño, solo pido que se atrevan a conocer la historia de nuestro país para que no se repita".