"Fue horroroso, lo pasé mal": Nuria Roca confiesa en 'El hormiguero' su peor experiencia laboral

Un jueves más, la tertulia de actualidad de El hormiguero ha estado plagada de anécdotas y curiosidades de sus colaboradores. Este 14 de noviembre, Nuria Roca, Juan del Val, Tamara Falcó y Cristina Pardo departieron con Isabel Preysler, invitada de lujo tras ser la entrevistada de la noche, una velada en la que todos ellos compartieron algunos de los momentos "tierra, trágame" que han vivido, con la presentadora de La Roca llevándose la palma al relatar el día más vergonzoso de su vida.

A propósito de los ladridos que se colaron en el parlamento europeo antes de una de las intervenciones de Pedro Sánchez, Pablo Motos quiso saber si alguna vez les había sucedido algo inesperado en un acto muy importante. Nuria fue la primera en abrir fuego, confesando el que más le ha marcado: "Creo que fue la mayor vergüenza que yo he pasado en la vida, la vez que presenté un acto, un evento, y no fue nadie. Cuando digo nadie es nadie, pero nadie, nadie, ni una sola persona".

"Ni una sola persona ni ningún medio, que era una presentación", matizó Juan del Val, quien al parecer tampoco había ido a arroparla en esa ocasión. "Exacto, no fue absolutamente nadie", confirmó Roca, generando mucha curiosidad entre sus compañeros sobre lo sucedido.

No tardaría en sacarles de dudas, compartiendo la explicación que los responsables del evento le dieron por aquel entonces: "Yo tenía mucha curiosidad por saber qué había pasado. Era un evento en una feria de muestras. El acto era al final de la feria, por lo que me dijeron que, como todo el mundo era de fuera, habían cogido ya los trenes y los aviones para irse. Esa era la excusa que a mí me reconfortó, pero la verdad es que no fue nadie".

"Fue horroroso, la verdad es que lo pasé mal, pero me curtió", reconoció acto seguido, subrayando que, al menos, este mal trago le sirvió de aprendizaje de cara al futuro. Lo curioso es que no fue la única vez que le sucedió algo así, ya que Juan daba posteriormente un paso al frente para rememorar otra situación similar: "En una firma de libros, de un libro que hicimos tú y yo, tampoco fue nadie. Ese día, además, pusieron seguridad y vallas para que la gente de la firma no se amontonara, pero no fue nadie. Firmamos los libros a unas dependientas del centro comercial. Fue una ruina horrorosa", explicó entre risas.