Jordi González se sincera tras 'La plaza': de los hándicaps del programa al "ilusionante" proyecto que TVE le ofreció antes

Apenas cinco días después de que Televisión Española llevara a talleres La plaza, Jordi González accedió a charlar unos minutos en El matí de Catalunya Ràdio este miércoles, 11 de octubre. A raíz de "la suspensión" del magacín vespertino de La 1, que en ocho entregas promedió un 6,6% de share y apenas reunió a 456.000 espectadores, el presentador lanzó algunas reflexiones.

González reconoció haber capitaneado programas que han durado más o menos tiempo, pero, desde luego, no uno tan corto de duración, en concreto, de 55 minutos. "No es una cancelación, en realidad, es una suspensión", confirmó el comunicador catalán, desvelando que la Corporación está "reformulando" el espacio para pasarlo al fin de semana.

Jordi iba a presentar un espacio informativo matinal en TVE: "Hubo elecciones y se paró todo"

Lejos de dramatizar por la retirada de La plaza de la parrilla de la cadena pública, Jordi se definió como "un soldado de la tele": "De esta propuesta, me hacían gracia dos cosas. Primero, que en directo. Segundo, que solo había gente de la casa, [la producción] no estaba externalizada".

De hecho, el programa nació fruto de un acuerdo alcanzado entre los sindicatos UGT y SI con el Comité Intercentros y la presidenta interina de la Corporación, Elena Sánchez Caballero, con el objetivo de impulsar la producción interna. El barcelonés afirmó que, por esta razón, se palpaba ese "entusiasmo" entre los miembros del equipo, en el Estudio 1 de Prado del Rey.

"No sé si no hemos acertado en el formato, en la hora de emisión... Salir cuando otras cadenas están haciendo programas con tantos recursos [...] Cuando una cosa no funciona, es mejor anularla de la manera menos traumática. Y si se puede reformular, se reformula. Si no, ya haremos otras", asumió, tranquilo, Jordi González.

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Tal y como lamentó el entrevistado, la cuestión es que las tardes de La 1, que gozan de la fortaleza de productos como La promesa, El cazador o Aquí la tierra, sufrían las bajas audiencias del espacio en el que participaron Terelu Campos o Marta Nebot, entre otras tertulianas. González reivindicó la necesidad de una ventana al "directo" en la franja vespertina, que en este momento se sostiene sobre dos pilares fundamentales: la ficción y los concursos.

Con respecto a las que eran sus principales competidoras, Ana Rosa Quintana y Sonsoles Ónega, Jordi opinó que en sus espacios "se estaban gastando millonadas en hacer cosas interesantes, pero también escabrosas". Y es que, ni "TVE ni TV3", como televisiones públicas, pueden permitirse "estar toda la tarde hablando de Daniel Sancho".

Por último, el que expresentador de los debates de Gran hermano o Supervivientes reveló que la oferta que le realizó TVE para la conducción de Lazos de sangre también incluía la de un espacio informativo matinal que le hacía "ilusión": "Como hubo elecciones, se paró todo. Iba a empezar con información y derivar ya con temas más de entretenimiento, pero como hubo elecciones no podían reinventar nada".