Sandra Barneda, rota en 'Así es la vida' (Telecinco) ante la dura situación que ha vivido un invitado

Este miércoles, 2 de agosto, Así es la vida ha querido poner el foco en eso que llaman "la magia de Twitter". El programa de Telecinco se ha interesado en la historia viral de Alberto, un joven que se lanzó a emprender abriendo una hamburguesería en Valencia y que tuvo serias dificultades para que su negocio saliera adelante.

Como último recurso, el chico escribió el siguiente mensaje en Twitter: "He abierto un negocio de comida a domicilio en Valencia, pero no entran pedidos. Juro que la comida está buenísima. Si pides y me pones en observaciones que vienes de Twitter, te regalo un entrante". Pues, bien, el tuit ha sido tan compartido que ahora acumula 5 millones de visualizaciones y la cosa va viento en popa.

Sandra: "Jo, qué bonito. Estás en una nube de buena energía, de mucho amor que estás recibiendo"

La difusión ha sido tal que ahora el establecimiento precisa de personal, dado el ingente volumen de pedidos. Nuria Grau, reportera del formato de Cuarzo, se ha desplazado hasta la capital del Turia para conocer de primera mano el tema. "He vuelto a confiar en la humanidad", ha asegurado Alberto, que ha expresado que, cuando publicó el comentario, "no tenía margen de error" alguno: "Cualquier hora que destines en una cocina es dinero que tienes que pagar de luz, alquiler, agua...".

El empresario ha aprovechado el altavoz que le proporcionaba el espacio vespertino para decir que necesitaba "gente con ganas de evolucionar y aprender" con él. Eso incluye, auxiliares de cocina, repartidores y un largo etcétera. El momento ha pasado a un plano más emotivo cuando César Muñoz ha anunciado que Manolo, abuelo del protagonista y uno de los inversores del restaurante de comida rápida, se unía a la conexión, a través de videollamada.

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"Ya puedes meter más dinero, que esto tiene que crecer", ha bromeado el chico ante su abuelo, que se deshacía en halagos hacia su nieto: "Es muy emprendedor, muy buena persona, trabajador. Todo lo que pueda se lo doy". Mientras tanto, Sandra Barneda contemplaba, con un nudo en la garganta, la estampa: "Jo, qué bonito. Estás en una nube de buena energía, de mucho amor que estás recibiendo".

Alberto no ha podido reprimir las lágrimas y solo ha atinado a decir que está "preparado para trabajar y que la gente se quede contenta", además de acordarse de su abuela: "La echo de menos. Yo sé que ella estaría aquí". En este punto de la conversación, ahora era la presentadora de Así es la vida la que se echaba a llorar y agradecía al joven su presencia en la entrega de este miércoles.