"Para viejo ya estoy yo": la rocambolesca exigencia de un soltero ante su cita ('First Dates')

Pepa y Chema no han salido juntos de la mano por las clarísimas exigencias del soltero. Después de charlar fugazmente en el restaurante de First Dates, el hombre le ha comunicado a su cita que ni por el lugar en el que vive, ni mucho menos por su edad, volvería a quedar con ella.

Ella tiene 69 años y él 68. Pepa vive en Valencia y Chema en Madrid, pero los dos tienen sus vidas bastante ajetreadas y les gustan casi las mismas cosas, como por ejemplo viajar en crucero y conocer nuevos sitios. Sin embargo, el hombre tuvo cristalino nada más verla que no iba a tener nada amoroso con ella.

"Lo de la vejez se pega. Eso es como una enfermedad. Nunca vayas con viejos"

"Aunque tengamos la misma edad, para mí es mayor. A lo mejor ella también piensa: 'Está mayor para mí'. Pero a mí me gusta hablar, estar, salir y entrar con mujeres de hasta 30 años, como mucho", llegó a confesar Chema fuera de cámara, ya que Pepa tenía casi 40 años más que el prototipo de chica que a él le atraen.

"Para viejo ya estoy yo. ¡Cómo voy a estar con otra vieja! Hay que ser un poco consecuente. No hay que decírselo así, pero... No", se atrevió a añadir, en clara alusión a su rocambolesca exigencia para encontrar el amor. Poco después, durante la cena, el soltero le dejó claro que suele salir en discotecas donde el ambiente rondaba los 20 años, "porque mi amigo es el dueño".

Una vez más, el hombre le confesó al redactor del programa que estaba aburriéndose con Pepa, algo que con una chica joven no le ocurriría: "Ya hemos terminado los temas de hablar, no hay más inquietud. Los cruceros que he hecho, el amigo de no sé donde... Hemos terminado los temas. Pero, con la gente joven, sí, porque ellos tienen muchas ideas, mucha fuerza, yo les puedo aportar y rebatir experiencias, me gusta debatir con ellos...".

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Á. Roldán

"Lo de la vejez se pega. Eso es como una enfermedad. Nunca vayas con viejos. Ni Imserso ni nada", le llegó a advertir a su cita antes de levantarse de la mesa, y después de que ella le comentara que ha realizado más de 12 viajes en barco mediante la conocida entidad social para personas mayores. Finalmente, y pese a que ella sí querría haber tenido un segundo encuentro, Chema se negó en rotundo por vivir lejos y sobre todo por la edad que tenía.