El enfado de Santi Millán, víctima de la filtración de un vídeo sexual: "Se ha cometido un delito"

El presentador Santi Millán se convirtió este domingo en 'Trending Topic' después de que se filtrara un vídeo privado, de índole sexual, en redes sociales. Aunque la publicación y difusión de este tipo de contenidos es delito, el vídeo se hizo rápidamente viral. Twitter bloqueo numerosas cuentas, pero a medida que el vídeo desaparecía de unas saltaba a otras.

Es el propio Millán, de 53 años, el que con el móvil graba el vídeo, de apenas un minuto de duración. El diario 'ABC' ha tenido ocasión de hablar con la víctima, aunque no ha querido valorar lo sucedido: "No pienso hacer ningún comentario".

No obstante, el presentador de 'Got Talent España' ha mostrado su perplejidad por cómo se ha abordado el asunto: "Yo no quiero decir cómo hay que enfocar las cosas, pero la noticia aquí es que se ha cometido un delito. Yo no entiendo de leyes ni demás, así que no voy a comentar".

Aunque Santi Millán sea un personaje público, la filtración de cualquier tipo de contenido no autorizado está considerado como delito. La persona responsable de esa filtración podría, por tanto, enfrentarse a problemas legales.

Caso Olvido Hormigos

En 2012, la difusión de un vídeo privado de Olvido Hormigos, exconcejala socialista de Yébenes, desató una enorme polémica y provocó la modificación del código penal en nuestro país. Desde ese momento, el Código Penal incluyó como delito la difusión no autorizada de imágenes o grabaciones íntimas.

Tras la reforma del Código Penal, el artículo 197.7 quedó de la siguiente manera: "Será castigado con una pena de prisión de tres meses a un año o multa de seis a doce meses el que, sin autorización de la persona afectada, difunda, revele o ceda a terceros imágenes o grabaciones audiovisuales que hubiera obtenido con su anuencia en un domicilio o en cualquier otro lugar fuera del alcance de la mirada de terceros, cuando la divulgación menoscabe gravemente la intimidad personal de esa persona".

Se considera delito, según la reforma de 2015, aunque la víctima diera en su día su consentimiento a la grabación, ya que hasta entonces solo se consideraba delito la difusión de un vídeo de carácter íntimo si había sido grabado en un lugar privado sin autorización del protagonista o si las imágenes habían sido robadas.

Un hecho plasmado en 'Intimidad'

Precisamente el pasado 10 de junio se estrenó en Netflix 'Intimidad', una serie que retrata perfectamente un caso bastante similar. Tal y como explica esta ficción, la vida cambia en un instante. En un clic, tu vida privada deja de ser privada para convertirse en pública en milésimas de segundo.

Un video sexual de una política con futuro prometedor (Itziar Ituño, 'La casa de papel'), filtrado a la prensa, es el catalizador de esta historia que narra la vida de cuatro mujeres que se ven forzadas a pisar la delgada línea entre lo que pertenece a la vida pública y privada. ¿Dónde están los límites de nuestra intimidad? ¿Qué pasa con nuestras vidas cuando nuestra privacidad se convierte en la conversación de todo el mundo?

'Intimidad' es una nueva ficción que se ha rodado en El País Vasco y que ha sido creada por Laura Sarmiento ('Matadero', 'La Zona') y Verónica Fernández ('Caronte', 'Hache'). Es una historia sobre la imagen que elegimos proyectar y su desajuste con la realidad.