Rosa Benito, hecha un mar de lágrimas en Telecinco tras su encuentro con Lequio

Nueva guerra abierta en Telecinco, en esta ocasión entre dos colaboradores de una misma productora: Alessandro Lequio y Rosa Benito. El italiano arrancaba la semana afeando el teatrillo que montó la colaboradora en 'Sálvame' cuando fundió las alianzas de su boda, que años más tarde se descubrió como falsas. Las críticas del tertuliano no sentaron nada bien a la exmujer de Amador Mohedano, quien aseguraba en 'Ya es mediodía' que le daba pena y que lo encontraba mayor.

Como era de esperar, su réplica no se hizo esperar, y llegaba en forma de durísimo ataque: "Sabía que Rosa era muchas cosas, entre ellas una mentirosa que se viste por los pies... pero ahora me he dado cuenta de que es cortita, pero muy cortita. Ella se justifica diciendo que estaba herida, pero lo estaba con Amador... el numerito con el soplete era una mentira hacia toda la audiencia, no tiene nada que ver".

"Que me llame mayor es un ejemplo más de lo cortita que es. La dueña de la empresa en la que trabaja es de mi misma quinta, el novio de la presentadora con la que trabaja también lo es, por cierto, se lo presenté yo. En fin, habla de pena, pena debería darle su hija que en vez de ponerse la bata de cola como su tía está vendiendo braguitas en una web para adultos", le espetaba ante la atónita mirada de sus compañeros en 'El programa de AR'.

Horas más tarde era el turno de Rosa, quien reventaba en 'Ya son las ocho' ante el golpe bajo sobre Chayo Mohedano: "Creía que tenías un humor un poco más natural. A mí me gusta ser mayor, porque eso quiere decir que tengo vida, que he vivido. Cuando dices lo de cortita no sé a qué te refieres. Medía 1,73, ahora 1,70 porque con la edad… Pero de cortita no tengo nada", arrancaba diciendo la colaboradora.

Su programa optaba por no emitir el fragmento en el que Lequio hacía esa referencia a Chayo, pero Benito sí le respondía sobre esta cuestión, aunque pudiera estar desconcertando a la parte del público que desconocía de dónde venía su mayúsculo enfado: "Si tienes que decirme algo dímelo a mí, a mi familia déjala en paz. Dime a mí hija de la gran pu***, pero a mi entorno déjalo tranquilo".

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"Métete conmigo que yo estoy aquí para defenderme, no con la familia. Lo único que quise decir con mayor es que llevábamos mucho tiempo en la tele. Si te he ofendido te pido disculpas. No quería ofenderte. Pero los hijos duelen mucho, así que lo que tengas que decir, dímelo a mí", repetía una y otra vez, tratando de recuperar el foco en este enfrentamiento, pero sin que Sonsoles Ónega entendiese qué había querido decir entonces al llamarle mayor a su ahora nuevo enemigo.

"No me sienta mal que me recuerden lo de los anillos, pero no me gusta que me insulten. ¡Que se meta conmigo que yo no me meto con nadie de su entorno, con nadie! Claro que eso me duele. Si eres tan valiente, métete conmigo. No te voy a contestar a lo demás. Deja a las familias, Alessandro Lequio. Los hijos duelen mucho, ¡mucho! ¡Métete conmigo!", sentenciaba con contundencia, mirando desafiante a cámara.

Rosa llora sin consuelo

La nueva respuesta de Lequio no tardaba en producirse, con el colaborador explicando que su enfado no venía por lo de "mayor", sino por decir que "le daba pena", unas palabras que interpretó en relación con su situación personal. Nada más lejos de la realidad, como explicó en 'Ya es mediodía' Rosa, hecha un mar de lágrimas. La tertuliana explicó que en ningún caso se refería a lo que ha pasado con el fallecimiento de su hijo, porque ella no mete a los hijos en este tipo de enfrentamientos mediáticos. Precisamente por eso le dolía tanto su ataque.

Rosa se desmoronaba, comenzando a llorar mientras daba la cara por su hija: "No se puede hacer daño para ver cómo salto. No le perdonan que sea sobrina de Rocío Jurado, aunque lleva 20 años siendo artista. Pusiste a mi hija de pu***, y tiene tres niños de colegio a los que les llegan todas estas cosas. Ya basta de ir contra ella, que llevan machacándola durante 20 años y lo único que ha hecho es cantar, defender su música. Ahora además es compositora. ¡Dejadla en paz de una vez por todas, que solo busca ganarse la vida honradamente! Lequio, si te he hecho daño te vuelvo a pedir disculpas, como he hecho esta mañana nada más entrar en Telecinco, ya que te busqué para aclararte lo sucedido. Así que basta ya de hablar de hijos", concluyó mientras se enjugaba las lágrimas.