Belén Esteban o el paradigma de la ¿nueva? televisión de Paolo Vasile

Paolo Vasile tiene una premisa: ser líder a toda costa. Basta ya de intentar quitarse el ‘sambenito’ de creador de telebasura y los intentos de ‘limpiar’ la imagen y programación de Telecinco.

La cadena de Fuencarral ha estado meses modificando su parrilla televisiva con distintas apuestas para recuperar el liderato perdido. Pero nada servía, nada gustaba. Por la privada pasaron Xq no te callas?, Guerra de sesos, La séptima silla, Mi gemela es hija única…y así hasta un sin fin de programas que terminaron hundiéndose.

Así que el italiano ha tirado por la tangente: volver al modo de televisión que tanto éxito y polémica le dio. Una programación agresiva con programas como G-20, abusando del corazón con Sálvame, que llega a ocupar hasta 7 horas de programación los viernes; o incluso declarando la guerra a otras cadenas tras el caso ‘Esteban’.

“Vasile no tiene a nadie en casa cuando llega que le diga lo que está mal o lo que está peor”, dicen expertos del sector. No es ningún secreto. "Cuando no tengo un compromiso de trabajo, me preparo algún triste menú y ceno solo, frente al televisor", decía el consejero delegado en una entrevista con Magazine.

Los resultados no podrían haber sido mejores: la privada ha recuperado en septiembre el liderato de las televisiones más vistas con un 16,1%, tras meses nueve meses sin serlo (la última vez fue en diciembre de 2008).

La 1 ha intentado a última hora arrebatar este puesto de honor a la privada con la Champions League y programando cine ‘made in USA’, pero al final la pública se ha visto relegada a una segunda posición con un 15,7%.

El fenómeno Esteban

Algo innegable en esta subida de Telecinco es el fenómeno Belén Esteban. La privada dio un golpe de efecto a mediados de septiembre haciéndose con el liderazgo mensual gracias a la polémica levantada en torno a la colaborada de Sálvame. El programa batió sus mejores marcas y su versión Deluxe se asentó en la noche de los viernes, una franja hasta entonces maldita para la cadena.

La cadena de Fuencarral llenó su parrilla con el caso y los datos de sus programas se dispararon.  Sus datos de la mañana se incrementaron con la llegada de El programa de Ana  Rosa, los de las sobremesas hicieron lo propio con el programa de Jorge Javier Vázquez, y el acess time mejoró ligeramente con el agresivo programa de Risto Mejide.

Entre los programas más destacados de la cadena también han destacado el siempre polémico Gran Hermano, la serie Sin tetas no hay paraíso o la miniserie sobre la vida del torero Paquirri.

Anunciantes reticentes

Pero a pesar del liderato Telecinco sigue teniendo un grave problema: los ingresos por publicidad. La cadena va a facturar un 40% menos que hace un año, con lo que perderá unos 28 millones de euros.

Algo que puede pronunciarse aún más debido a que los anunciantes son reticentes a asociar su imagen a una televisión definida como ‘telebasurera’ y menos cuando su liderato no es tan estable. La 1 tiene en su poder los derechos de la Champions League y aún tiene pendiente de estreno la todoterreno Águila Roja. Antena 3 espera mejorar su audiencia con El Internado y cruza los dedos porque Curso del 63 se asiente en parrilla. Pero además laSexta arañará décimas ahora que se ha sabido que Fernando Alonso ha fichado por Ferrari.

La guerra de audiencias sólo ha comenzado.

Apostar por Internet

Con este panorama y sabiendo que Internet se está convirtiendo poco a poco en el primer soporte publicitario por encima de la televisión, Telecinco ha decidido apostar por su web. En los últimos meses está volcando la mayoría de sus programas e incluso creando material exclusivo para Internet, lo que le ha llevado a ser la web más vista de televisión con 6.500.000 de usuarios únicos.

Evidentemente en la web también se sigue este ¿nuevo? modelo. Telemanía atiza cada lunes a laSexta por las audiencias de la Fórmula Uno, G-20 tiene su propia lista crítica y los vídeos de Sálvame son los más descargados.

Habrá que esperar por tanto a los datos de octubre para conocer cuál es el futuro de la televisión española actual a pocos meses de producirse el apagón analógico.