China prueba su nuevo portaaviones creado para la guerra del futuro
China ha probado un portaaviones en forma de catamarán diseñado específicamente para operar enjambres de drones con los que anular y destruir las defensas enemigas
La Marina china ha probado su nuevo portaaviones diseñado especialmente para la guerra del futuro, en la que los enjambres de drones serán una de las piezas fundamentales de los enfrentamientos militares, atacando masivamente al enemigo para saturar defensas y destruir objetivos.
Este nuevo portaaeronaves — del que informó por primera vez el blog militar The Warzone cuando los chinos lo botaron en mayo de 2021 — es una especie de catamarán que parece específicamente pensado para “simular enjambres de drones enemigos, así como otras amenazas, como ataques de grandes números de misiles antibuque y ataques de guerra electrónica distribuidos”.
Como apunta Jesús Román — editor de la Revista Ejércitos — la televisión nacional china CCTV recogió las imágenes del catamarán en acción en las últimas maniobras navales conjuntas que las marinas chinas y rusas. Las maniobras comenzaron el 21 de diciembre y terminarán el día 27 en la provincia de Zhejiang, en la costa este del país asiático.
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— Jesus Roman (@jesusfroman) December 22, 2022
For first time, the🇨🇳ZC300 VTOL UAV is seen operated in multiple numbers (≥3) by the PLAN with other 2 VTOL UAVs totalling 5.
Note the rear ship landing floor areas are different in both shots, which shows taking off and landing areas are 2 different ships pic.twitter.com/1m4LSccLU6
Según dice Román, uno de los modelos de dron en las imágenes es un ZC300. Este dron helicóptero de dos rotores es bastante modesto con un fuselaje de tres metros de largo y una velocidad punta de 140 kilómetros por hora. The Warzone afirma que el ZC300 es un dron logístico para llevar pequeñas cargas — un máximo de 120 kilogramos — pensado para aplicaciones civiles y del que no se conocía ninguna aplicación militar hasta la aparición de las imágenes en la televisión china.
Enjambres de drones autónomos
Los drones se han convertido en una parte fundamental de la guerra en Ucrania, demostrando una alta capacidad destructiva por un precio muy barato. Tanto Estados Unidos como China están invirtiendo grandes cantidades en el desarrollo de estas máquinas. De hecho, los drones de bajo coste usados en Ucrania — capaces de llevar la eliminación de equipos militares que cuestan cien veces más, destruir infraestructura y aterrorizar a la población civil — no son nada comparado con lo que China y EEUU están creando.
Los americanos piensan que estas máquinas serán imprescindibles en un posible conflicto en Taiwán, según explicaba el pasado mayo David Ochmanek, ex Subsecretario Adjunto de Defensa para el Desarrollo de las Fuerzas Armadas e investigador senior de asuntos internacionales y defensa del ‘think tank’ RAND Corporation. Según Ochmanek, los EEUU están realizando simulaciones de escenarios en los que estamos tratando de hundir rápidamente la flota de invasión en el Estrecho tratando de despejar los cielos de los combatientes del EPL [Ejército Popular de Liberación chino], transportes [navales, con tropas de desembarco], helicópteros de ataque [y] helicópteros de transporte.”
El escenario que describe Ochmanek, que contamos en detalle en el documental de Control Z: Las Armas Definitivas (bajo estas líneas), “imagina mil vehículos aéreos no tripulados sobre Taiwán y el estrecho de Taiwán. No son aviones grandes, pero vuelan a alta velocidad subsónica. Puedes imaginar que su sección transversal de radar es indistinguible de la de un F-35. Los vehículos aéreos no tripulados están básicamente delante. Están haciendo la misión de detección. Los aviones tripulados van detrás [del enjambre]. Imagina ahora ser un operador de [un sistema de misiles tierra-aire] SA-21 en la parte continental de China o en uno de los grupos de acción de superficie. Si no los destruyes, te vamos a encontrar. Y si te encontramos, te vamos a destruir”.
Una nueva carrera armamentística
A partir de ahí, Ochmanek describe un escenario en el que la saturación de sensores y sistemas de armamento con drones de usar y tirar neutraliza la capacidad de ataque y respuesta china. Si las baterías antimisiles y la fuerza aérea asiática están ocupadas intentando eliminar miles de drones volando de forma coordinada controlados por una inteligencia artificial, no pueden centrar su capacidad ofensiva en atacar a los aviones de combate norteamericanos y taiwaneses.
Obviamente, los chinos no se han quedado cruzados de brazos y este nuevo portadrones es prueba de ello. Están activamente entrenando para enfrentarse a este tipo de amenazas, pero también para realizar la misma jugada hacia el lado contrario. Por eso están construyendo nuevas máquinas e invirtiendo en inteligencia artificial. De hecho, una de las últimas doctrinas propuestas por los estrategas chinos es el usar inteligencias artificiales tácticas para tener la ventaja en el campo de batalla.
La Marina china ha probado su nuevo portaaviones diseñado especialmente para la guerra del futuro, en la que los enjambres de drones serán una de las piezas fundamentales de los enfrentamientos militares, atacando masivamente al enemigo para saturar defensas y destruir objetivos.