Escrivá anuncia su 'plan digital': nueva ley de ciberseguridad y más fábricas de chips

El ministro de Transformación Digital y Función Pública, José Luis Escrivá, ha anunciado hoy en el Congreso las que serán las líneas clave de su cartera durante la presente legislatura. No hay grandes sorpresas, pero sí dos apuestas relevantes: el anuncio de una nueva ley de ciberseguridad y la intención de impulsar la apertura de nuevas fábricas de chips en nuestro país. Según fuentes del ministerio, ya hay conversaciones en marcha con diversas multinacionales estadounidenses para negociar el establecimiento de nuevas plantas, aunque, de momento, no ha trascendido ningún nombre.

La propuesta de una nueva ley de ciberseguridad llega en el momento de mayor actividad de ciberataques en nuestro país, no solo contra grandes empresas, también contra la Administración del Estado. El Jefe del departamento de Ciberseguridad del Centro Criptológico Nacional (CCN), dependiente del CNI, reconoció recientemente que el 2023 había sido, con diferencia, el año en el que se habían detectado mayor número de ataques críticos en España, más de 120, frente a 75 en el 2022, un 60% de aumento.

El Ejecutivo quiere ahora plantear una ley con un "enfoque integral" que logre aumentar los recursos y defensas del sector público y privado frente a los ciberataques. Hasta ahora, el Gobierno había aprobado la Ley de Ciberseguridad 5G (agosto 2022), centrada en el marco de las telecomunicaciones, pero faltaba ampliar esa regulación a todos los ámbitos. Fuentes del ministerio de Transformación Digital aseguran que la nueva ley contará con más de 1.500 millones de euros procedentes del plan de recuperación en ciberseguridad. El Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe), ofertará además más de 10.000 plazas de formación especializada en esta materia entre 2024 y 2026.

La ley de ciberseguridad es uno de los 6 ejes de actuación que ha detallado hoy el ministro en su intervención en la Comisión de Economía, Comercio y Transformación Digital en el Congreso. Otra de esas grandes líneas serán los procesadores. Estos componentes son ahora más estratégicos que nunca tras el boom de la IA generativa y el Gobierno se plantea abrir nuevas plantas de diseño y fabricación en nuestro país.

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De momento, este impulso solo se ha saldado con el anuncio el verano pasado por parte de la estadounidense Broadcom de una fábrica de chips, la primera de este tipo de la multinacional en Europa. Cisco también se comprometió a abrir en España su primer centro en Europa de diseño de procesadores. Ahora, fuentes del gobierno aseguran que hay conversaciones adicionales en marcha para negociar el arranque de nuevas plantas. En juego están los 12.500 millones de euros del Proyecto Estratégico de Microelectrónica y Semiconductores, conocido como PERTE Chip.

El Gobierno ha anunciado también planes para aumentar el despliegue del 5G en nuestro país, a través del Plan Impulso 5G, dotado con un total de 1.440 millones de euros. El objetivo es avanzar en la disponibilidad de esta conexión, no solo para beneficiar a los ciudadanos, también a las empresas, e impulsar proyectos en el sector sanitario (tele diagnóstico), de seguridad (vigilancia de puertos y todo tipo de instalaciones con drones) o en el sector agrario (control de cosechas a través de aparatos conectados).

Más inteligencia artificial, ¿más empleo?

En su intervención en el Congreso, José Luis Escrivá ha propuesto un gran consenso para el impulso de la inteligencia artificial como gran generadora de empleo. Según datos del ministerio, hay evidencias de que esto ya está sucediendo. Comparado con la situación económica antes de la pandemia, el empleo en el sector tecnológico en nuestro país está creciendo mucho más rápido que en el resto de sectores. Mientras en el conjunto de la economía, el empleo crece a un ritmo del 8%, en el sector de profesiones técnicas y científicas crece el doble, y el triple en el sector de información y comunicación. Es decir, supone 1 de cada 5 de los 1,4 millones de empleos creados en España desde 2020.

El ministerio de Transformación Digital plantea diversas líneas para impulsar el desarrollo de la IA. Una se centra en desarrollar la capacidad de supercomputación de nuestro país, ampliando la de conectividad que depende de centros como el Barcelona Supercomputing Center y la Red Española de Supercomputación. Quiere, además, poner el español en el mapa de la IA, uniendo las fortalezas de la Real Academia Española (RAE), la Biblioteca Nacional y el Instituto Cervantes para lanzar proyectos que logren desarrollar documentos y datos en torno al español.

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Otra de las prioridades del ministerio será el desarrollo de aplicaciones industriales de la IA, sobre todo en el sector sanitario y energético. En este marco, el fondo Next Tech prevé movilizar hasta 4.000 millones de euros en colaboración público-privada para ayudar a empresas y startups a usar IA en el día a día de sus actividades. Por su parte, el proyecto Kit Digital ha generado ya 327.000 concesiones de fondos, por un total de 1.450 millones de euros. En las próximas semanas, se realizará una nueva convocatoria para empresas de hasta 250 empleados, con el objetivo de que comiencen a usar aplicaciones de IA en su operativa diaria.

Está por ver qué ocurrirá con todos estos proyectos y promesas si se aprueba la ley europea de IA, actualmente en tramitación. España lideró el año pasado su negociación en Bruselas, dentro de la presidencia rotatoria del Consejo Europeo, pero la ley quedó en el aire, con Francia y Alemania mostrando su rechazo al actual borrador. Otras iniciativas, como la recién creada Agencia Española de Supervisión de Inteligencia Artificial (AESIA), con sede en A Coruña, tendrán que esperar también a ver qué ocurre con esta ley europea de IA para echar a andar de verdad.