El TSJM da la razón a 532 'riders': sentencia que son falsos autónomos de Deliveroo

No son autónomos. Son trabajadores de Deliveroo. El segundo asalto del macrojuicio que emprendieron más de medio millar de 'riders' contra la plataforma de reparto a domicilio se ha vuelto a saldar a su favor. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid, órgano al que recurrieron la primera sentencia en su contra, ha vuelto a dar la razón a la Inspección de Trabajo.

La Seguridad Social fue la que actuó de oficio y denuncio a la compañía de las mochilas azul turquesa ante el Juzgado de lo Social número 19 de Madrid. Entonces, este órgano dio la razón a la Administración en una sentencia que fue recurrida hasta esta instancia superior, que ahora vuelve a fallar contra los modelos laborales de las compañías de 'food delivery'.

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Un recurso en pleno

La Justicia ha comprado prácticamente todos los argumentos de Trabajo, que ahora reclama el pago de las cuotas a la Tesorería de la Seguridad Social, que hubiesen tenido que pagar si fuesen asalariados desde un primer momento. Un montante que asciende a más de 1,2 millones de euros.

La Seguridad Social exige el pago de cuotas impagadas, algo que podría ascender a 1,2 millones

El recurso ante el TSJM llegó por parte de la empresa, pero también por parte de una asociación de repartidores, Asoriders, alineada con los intereses de Deliveroo. El texto del tribunal no ha contado con ninguna objeción por parte de ninguno de los 20 jueces que han decidido sobre este asunto y que han rechazado en pleno todos sus argumentos.

El asunto no es minúsculo, ya que además de suponer un importante revés para una de las 'startups' más pujantes del momento, sienta un precedente para otros casos similares de trabajadores de esta firma y otras como Glovo. Algo que puede suponer un misil en la línea de flotación de su modelo de negocio en caso de que el Supremo, siguiente instancia a la que pueden recurrir, apunte en la misma línea que las sentencias han dibujado hasta ahora.

No es la primera vez que el TSJM se pronuncia sobre este enconado conflicto que, aunque de diferente manera, afecta a Glovo y a Deliveroo.

Es más, la primera, empresa fundada en Barcelona, también recibió un varapalo similar por parte de este mismo titular, que consideró que sus 'glovers' eran falsos autónomos. Sin embargo, no era una macrodenuncia como esta sino que se trataba de un caso individual.