Un adolescente italiano gana jugando a la PlayStation más que el jefe de la NASA

Seguramente todavía no le conozcan y eso que el público que sigue a este joven es respetuosamente numeroso. Con apenas 19 años, el italiano Lorenzo Ostuni, alias Favij, es una de las grandes estrellas de YouTube del mundo.

Un fenómeno que se escapa de la lógica de los medios de comunicacón tradicionales y que se convierte en exitoso con una rapidez fulminante. Tanto es así, que en 2013 Favij tenía alrededor de dos mil seguidores en su canal y en la actualidad esa cifra se ha disparado hasta llegar a los más de 1,3 millones de espectadores que reproducen sus vídeos e incluso le piden autógrafos.

En la línea del español TheWillyrex o del sueco PewDiePie, que se vanagloria de tener 32 millones de usuarios inscritos en su canal, Favij también juega a videojuegos y mientras lo hace se graba en vídeo para después ofrecérselo a su público de YouTube. La clave del éxito de este chico que se ha convertido en un ídolo para los adolescentes de medio mundo reside en hacer bromas, poner caras y dar gritos mientras se pasa las pantallas para después comentar a modo de resumen los entresijos de los juegos independientes de moda.

550 euros por siete horas de trabajo

Lorenzo comenzó a jugar a los cuatro años, edad en la que cayó en sus manos el Metal Gear Solid para PlayStation y desde aquel momento no pudo despegarse de los mandos. Tal y como cuenta a La Repubblica, copió su pseudónimo de un jugador con el que compitió hace unos años en World of Craft, uno de sus videojuegos favoritos, pero sin duda fue con el lanzamiento de Slender: The Eight Pages, cuando se animó a convertirse en youtuber y abrir su propio canal de YouTube, que en muy poco tiempo comenzó a fidelizar usuarios.

En la actualidad, Favij dedica siete horas a jugar y después graba un vídeo de seis a diez minutos con herramientas simples como una webcam, un ordenador y dos programas para capturar las imágenes y editarlas. "Luego le echo mucha paciencia y mimo", comenta.

Gracias a ello gana 550 euros al día por comentar partidas, alrededor de 200.000 euros al año, seguramente mucho más de lo que puedan ganar sus padres o de lo que algún día ganará su grupo de la infancia, ese con el que descubrió este apasionante entretenimiento que ahora se ha convertido en profesión. Para que se hagan una idea: el Administrador de la NASA, Charles F. Bolden, gana algo más de 150.000 dólares al año (unos 120.000 euros).

"¿Te dedicarás siempre a esto?", le preguntan. "Grabé un vídeo sobre mi viaje a Los Ángeles que funcionó fenomenal. A veces pienso que si hablase de otras cosas que no fueran videojuegos tendría más éxito. Es mi personaje el que funciona, pero nací con los videojuegos independientes y por ahora tengo intención de seguir así".

Este gamer de 19 años añade que durante el último año de mieles no ha tenido tiempo para seguir con sus estudios, pero insiste en que tiene intención de volver. "En cuanto pueda, lo haré", finaliza.