El cadáver hallado en Cerdido "se corresponde al 100%" con Yago de la Puente, desaparecido en Ortigueira en 2019

Hace algo más de un año, un joven de 28 años que se encontraba con unos amigos en el Festival Internacional del Mundo Celta de Ortigueira (A Coruña) desapareció por completo, y ni amigos ni familiares volvieron a verlo. Yago de la Puente se había esfumado; esta misma semana, su nombre volvió a sonar después de que hallaran restos de un cadáver en A Barqueira, una parroquia del municipio coruñés de Cerdido, a menos de dos kilómetros del último lugar en el que se había visto con vida al joven coruñés. Días después, la Guardia Civil ha podido confirmar que estos restos óseos "se corresponden al 100%" con Yago de la Puente

Según traslada la Guardia Civil, el Servicio de Criminalística informó a última hora del viernes de la identificación de los restos. Familiares de Yago de la Puente trasladaron la información a través de redes sociales y también SOS Desaparecidos ha ratificado que su cuerpo ha sido localizado sin vida. Sus restos fueron encontrados en un monte ubicado en Casanova, perteneciente a la parroquia de A Barqueira, en el municipio de Cerdido. Aunque el hallazgo no trascendió hasta el jueves 27, fue un vecino de Cerdido que estaba buscando los marcos de su propiedad, para poder desbrozarla, el que localizó los huesos a última hora de la tarde del miércoles 26.

Tras el hallazgo de estos restos óseos los investigadores se se planten varias hipótesis. A menos de un kilómetro y medio de distancia es donde se pierde la pista a Yago de la Puente. Después de asistir al Festival de Ortigueira, De la Puente se trasladaba en un tren de FEVE en dirección a Ferrol, pero por causas desconocidas supuestamente se apeó del convoy en Cerdido. Tras haber denunciado sus familiares su desaparición varios testigos aseguraron que lo habían visto transitando en las proximidades de la estación de tren. Estas manifestaciones motivaron que, en varias ocasiones, en los días posteriores en incluso meses más tarde, se activaran varios dispositivos de búsqueda, en lo que participaron Guardia Civil, Protección Civil de varias localidades, además de familiares y amigos, que no logró dar con su paradero. Durante este tiempo tampoco se localizó ninguna de las ropas que vestía ni la mochila con la que viajaba.

La dura de búsqueda, tocada por el covid-19

Desde el principio, la búsqueda del joven se tornó complicada para los agentes, ya que nadie parecía saber nada sobre su paradero y no había ningún testigo que pudiese determinar hacia dónde se había dirigido. La única evidencia a la que se aferraban los investigadores era que De la Puente había sido visto por última vez por la carretera del municipio coruñés de Moeche. Hasta allí se desplazaron agentes del Seprona para cotejar la zona sin dar con ninguna pista. La búsqueda no cesó y meses después, en diciembre de ese mismo año, un dispositivo conformado por más de un centenar de personas retomó las labores en la zona de Cerdido, donde el joven cogió un tren de FEVE. Pese a las dificultades de la investigación ante las escasas pistas con las que trabajaba la Guardia Civil, los investigadores sostenían que no había "indicios" que apuntaran a una "desaparición forzosa".

Tras muchos días de búsqueda sin resultados, llegó el confinamiento provocado por la pandemia del coronavirus y, con él, las posibilidades de retomar la operación. Aunque durante ese tiempo el trabajo de campo se vio parado, el padre del joven desaparecido no dudó ni un instante a la hora de retomar la búsqueda por sí mismo cuando finalizó el estado de alarma. Hasta el momento, ese había sido el ritmo de la investigación; hasta que este pasado miércoles, agentes de la Guardia Civil hallaron en el lugar de A Casanova, perteneciente a la parroquia de A Barqueira, en el municipio de Cerdido restos óseos de un cuerpo humano.