La preocupación por ETA cae a mínimos y la economía capitaliza el miedo en España

Si quedaba alguna duda sobre la posible influencia que el comunicado de ETA pudiera tener en las próximas elecciones del 20-N, el barómetro del CIS de octubre disipa todas las incertidumbres: la preocupación por ETA ha caído a mínimos históricos (el puesto 17) y es la economía, con el paro a la cabeza, la que capitaliza en este 2011 el miedo de los españoles.

Nueve de cada diez españoles califican de ‘mala o muy mala’ la situación económica de España, y citan el paro como su principal preocupación (el 61,3% de los entrevistados) o los problemas de índole económico (otro 51% incluye estos entres sus principales temores). En la respuesta espontánea sobre los principales problemas de España, ETA y el terrorismo aparece en el puesto 17 con apenas una décima en el porcentaje de respuestas.

En cuanto a la situación política, el 66,3% de los entrevistados califica la gestión del PSOE en el Gobierno como ‘mala o muy mala’, aunque el PP, en la oposición, tampoco sale muy bien parado ya que más de la mitad de los interrogados, concretamente un 58%, tilda en los mismos términos su labor. Y es que los partidos políticos siguen ocupando un deshonroso tercer puesto entre los principales problemas del país.

Las instituciones más valoradas siguen siendo las Fuerzas Armadas (5,65), los medios de comunicación (4,97) y la Monarquía (4,89), que cae por primera vez al tercer lugar superada por los medios. En esta relación, los partidos políticos ocupan el último lugar (2,76) precedidos por el Gobierno (3,2).

Tampoco salen nada bien parados los integrantes del actual Ejecutivo de Rodríguez Zapatero: ni uno solo de sus ministros aprueba su gestión, y Carme Chacón es la más valorada con un paupérrimo 4,4 de nota. Claro que la titular de Cultura, Ángeles González-Sinde sigue abonada al último lugar, como en todos los CIS, con un 2,58% de nota.

La próxima semana, el CIS publicará, el miércoles o el jueves para que sea antes del comienzo de la campaña, su macroencuesta de intención de voto realizada el mes de octubre. Será el último gran banco de pruebas previo a la cita electoral del 20-N.