Cuba condena a 7 años al periodista y empresario español Martínez Ferraté

El periodista y empresario español Sebastián Martínez Ferraté ha sido condenado a 7 años de prisión en Cuba por “corrupción de menores” tras un juicio al que no tuvo acceso la prensa internacional. El periodista realizó en 2008 un reportaje con cámara oculta sobre la prostitución en La Habana, que se exhibió en Tele % bajo el título “Prostitución infantil en Cuba” y que desató las iras del régimen al abordar crudamente un tema tabú, y fue detenido cuando regresó a la isla en julio de 2010 como directivo de la cadena hotelera mallorquina “Marina Hotels”. Su esposa se queja del desamparo de las autoridades españolas.

La sentencia se dio a conocer en el régimen castrista el pasado fin de semana. Durante la vista, la Fiscalía cubana rebajó la petición de 15 a 10 años de cárcel y finalmente, Martínez Ferraté, de 57 años, ha sido condenado a 7 al retirársele el cargo de “proxenetismo” y mantener el de “corrupción de menores”. 

La condena ha sido un mazazo para su familia y una relativa sorpresa para las autoridades españolas, que confiaban durante la vista oral en el Tribunal Provincial de La Habana en que se le absolviera o, a lo sumo, se le impusiera un delito de desacato por infamia a las autoridades de la dictadura castrista, lo que hubiera supuesto una condena de 1 a 3 años que se hubiera saldado con la expulsión de la isla.

La esposa de Martínez Ferraté, María Ángeles Solá, ha pedido, en entrevista con Onda Cero, la implicación “personal” de la ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, que se encuentra de vacaciones y con la que la familia no ha tenido posibilidad de ponerse en contacto aún pese a que la condena se conoció el pasado sábado. La esposa del condenado sólo ha podido hablar personalmente con el embajador, Manuel Cacho, hombre muy próximo a Miguel Ángel Moratinos, que se acaba de reincorporar a la Embajada tras su periodo estival de descanso.

La esposa de Martínez Ferraté ha podido hablar por teléfono con su esposo, que permanece desde su detención en la cárcel cubana de La Condesa, en el municipio de Güines, a unos 60 kilómetros de la capital cubana. Según la mujer del condenado, está “muy deprimido” y no quiere que acuda a la isla a verle “porque teme lo que me pueda pasar. Tenemos una hija pequeña y no quiere que le suceda nada”, ha explicado a Onda Cero.

Profunda depresión

Las autoridades consulares españolas que siguieron el juicio anunciaron entonces que, si la sentencia era condenatoria, pedirían la expulsión del periodista por motivos de salud porque Martínez Ferraté sufría una profunda depresión. Lo que sucede ahora es que lo elevado de la condena, 7 años, puede impedir saldar la misma con una mera expulsión, por lo que la esposa del periodista y empresario reclama a la ministra Trinidad Jiménez que encuentre un hueco en sus vacaciones “y se implique de manera personal”, aprovechando la buena sintonía que tanto su antecesor, Moratinos, como ella misma han tenido con el régimen de La Habana.