Los becarios de investigación vuelven a la carga

Los becarios de investigación continúan con la lucha por mejorar sus derechos laborales. El grupo parlamentario de IU-ICV ha propuesto modificar la Ley General de la Seguridad Social con el fin de posibilitar la protección social y la contratación laboral de los becarios investigadores, tal y como recogió este diario el pasado 6 de abril, tras la maniobra del PSOE para retrasar ‘sine die’ estas mejoras.

En rueda de prensa en el Congreso, el diputado Ángel Pérez presentó la iniciativa, con la que pretenden que todos los becarios, tanto los predoctorales como los postdoctorales cuenten con contratos laborales "con todos los derechos de la actual normativa". Este grupo considera que el nuevo Estatuto del Personal Investigador en Formación presenta numerosas carencias, ya que no regula muchas modalidades de becas.

Por otra parte, responsables de la Federación de Jóvenes Investigadores recordaron la manifestación convocada para el próximo sábado en Madrid para hacer patentes sus reivindicaciones.

Pocos han sido los casos detectados, pero haberlos haylos: muertes por accidentes laborales en los que el fallecido tenía relación laboral con la empresa, aunque permanecía con contrato de becario. Esto es, trabajaba como cualquier otro empleado pero no cotizaba a la Seguridad Social.

Dos casos denunciados

El sindicato USO ha denunciado dos. El último, un experto en comercio exterior que residía en Pekín desde 2005 con la función principal de desarrollar programas bilaterales entre Shanghai y Las Palmas, como representante de la Autoridad Portuaria de Las Palmas. Según este sindicato, el joven falleció en Shanghai a finales del pasado mes de marzo por causas naturales, sin embargo, ha denunciado que su relación contractual con la Autoridad Portuaria de Las Palmas era a través de una beca.

Por el momento, dicha organización ha reclamado a la Inspección de Trabajo y Seguridad de Las Palmas que aclare si su situación se ajustaba a la de un becario o si existía una relación laboral plena "que no se materializó mediante la modalidad contractual oportuna”.

En el primer caso detectado por USO, sí se demostró que el becario de investigación que murió en una cámara frigorífica en Zaragoza en septiembre de 2004 mantuvo una relación laboral plena, de manera que la empresa tuvo que pagar todas las cuotas de la Seguridad Social que se había ahorrado por una contratación indebida.