Un turista graba su nombre y el de su novia en una pared del Coliseo: así podría ser la multa

Millones de turistas visitan cada día muchos monumentos y ubicaciones emblemáticas en todo el mundo, y no todos ellos se comportan siempre como es debido. Eso sí, cometer un acto vandálico hoy en día impunemente puede ser más complicado, y más aún en un lugar tan concurrido como el Coliseo de Roma, en el que fácilmente puede haber alguien que lo grabe con su móvil y lo comparta en redes sociales, exponiendo públicamente la agresión contra el patrimonio. En este caso, se ha hecho viral un vídeo de un turista al que no se le ocurrió otra cosa que grabar su nombre y el de su novia en una pared del Coliseo, utilizando un objeto punzante.

Pese a estar profanando uno de los monumentos más icónicos del mundo, que está reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es una de las siete maravillas del mundo moderno, el turista no parece dar mucha importancia a lo que hace: inscribe a la fuerza las letras en la pared con total tranquilidad, sin importarle toda la gente que hay alrededor. Y cuando se da cuenta de que alguien le está grabando, se da la vuelta y sonríe a cámara como si fuese un simple chico travieso. Sin embargo, esta acción podría tener importantes consecuencias para él, y más aún teniendo en cuenta que su cara es totalmente visible en el vídeo y se le puede identificar fácilmente.

De hecho, después de que el vídeo haya corrido como la pólvora en los últimos días, el organismo que gestiona el Parque Arqueológico del Coliseo ya ha presentado una denuncia contra este individuo, cuya nacionalidad no ha trascendido, así que es posible que una inminente sanción le borre pronto esa sonrisa.

Multas y penas de prisión

Además de ser vetado para volver al Parque Arqueológico del Coliseo, cuya entrada le estaría prohibida a partir de ahora, el turista podría enfrentarse a una cuantiosa multa administrativa por daños a un interés de bien cultural, en caso de que prospere la denuncia. Lo cierto es que no se trata de un caso aislado, y el monumento ha sufrido multitud de actos vandálicos de este tipo por parte de turistas empeñados en dejar su huella. Estas acciones dejan daños que, aunque pueden ser restaurados con el trabajo y coste que ello conlleva, también pueden generar secuelas permanentes, no solo en el Coliseo de Roma sino también en muchos otros monumentos de todo el mundo que también sufren este problema.

Ciñéndonos al mítico anfiteatro romano, en el año 2014 ya dio mucho que hablar una noticia similar, protagonizada por un turista ruso que talló su inicial en un ladrillo del Coliseo con una piedra afilada. En aquella ocasión, un vigilante de seguridad le pilló en el acto, y la broma le salió bastante cara: le impusieron una multa de 20.000 euros, y le condenaron a cuatro meses de prisión por vandalismo. Aunque no llegó a entrar a la cárcel, la sanción económica fue considerable.

Hace unos años, un turista ruso se llevó una multa de 20.000 euros por un acto similar

Sin embargo, aquella dura sentencia no hizo desistir a muchos otros visitantes del Coliseo, que a lo largo de los años han seguido rayando letras en las paredes, rompiendo trozos de los ladrillos para llevárselos a casa y realizando otros actos que ponen en peligro la integridad del monumento. Algunos fueron también identificados y se enfrentaron a sanciones, pero otros se han librado. En 2020 ya os contamos la noticia de un turista irlandés que también fue detenido tras ser descubierto tallando sus iniciales en el emblemático anfiteatro romano.

Ahora está por ver si el nuevo agresor del patrimonio asumirá sus responsabilidades por la acción que ha sido grabada recientemente. Los daños a los monumentos históricos y artísticos son un crimen según la ley italiana, que contempla multas de un mínimo de 2.065 euros, y penas de prisión de hasta un año por este tipo de actos vandálicos.