Mario Armero deja la presidencia de General Electric en España y Portugal

Mario Armero, actual presidente de general Electric para España y Portugal, ha hecho hoy pública su decisión de iniciar una nueva trayectoria profesional que, según sus propias palabras, “me va a permitir ser coherente con algunas consideraciones básicas para mí como es estar más cercano a los centros de decisión empresarial, y ante todo, mi deseo de permanecer en nuestro país, tan joven, dinámico y con enormes expectativas de futuro; aportando en la medida en que me sea posible, todo mi esfuerzo y entusiasmo”.

Armero, nacido en Madrid en 1958, es Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y lleva vinculado a GE más de 20 años. Inició su singladura como Secretario General de GE Plastics, en Cartagena. Desde el año 2001 es Presidente del Consejo General de GE para España y Portugal.

Experto en la gestión de equipos y de talento, Mario Armero asegura haber vivido estas dos décadas en el grupo GE como “esenciales en mi vida profesional, e incluso me atrevería a decir en lo personal, puesto que el desarrollo de GE ha sido una pasión para mi”. En el período 2002-2006, bajo la presidencia de Armero, la facturación del grupo en España y Portugal se incrementó de 800 a 2.700 millones de euros.

Asimismo, en la etapa de la presidencia de Mario Armero, GE ha impulsado en España y Portugal su capacidad de incrementar la envergadura de la compañía; de priorizar, crear y gestionar recursos en sectores de largo recorrido; y de aproximar GE a la sociedad española.

La estrategia impulsada por Armero en la empresa está basada en la “gestión del crecimiento” a través de alianzas estratégicas, el crecimiento inorgánico, la formación de equipos y la capilaridad en el territorio.

Para Armero, uno de los protagonistas de la vida económica y empresarial española de los últimos años, “el desarrollo español ha representado una magnífica oportunidad para empresas como GE, que han apostado por la inversión, la investigación y la diversificación. En definitiva, un escenario favorable para el crecimiento, siempre atento a las necesidades de la sociedad”.