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El oro rompe tendencia: se mantiene en "subida libre" en verano gracias a la Fed
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El oro rompe tendencia: se mantiene en "subida libre" en verano gracias a la Fed

Los máximos registrados esta semana están lejos de convertirse en un punto de inflexión en la cotización del oro. Desde que el lunes rompiera por primera

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El oro rompe tendencia: se mantiene en "subida libre" en verano gracias a la Fed

Los máximos registrados esta semana están lejos de convertirse en un punto de inflexión en la cotización del oro. Desde que el lunes rompiera por primera en su historia los 1.600 dólares, el metal precioso se ha mantenido estable en ese nivel, con pequeñas oscilaciones en un sentido y en el otro.

De esta manera, es lógico pensar que la fuerte inestabilidad que vive Europa a cuenta de la crisis de deuda es la respuesta al abrupto repunte del oro como valor refugio y, aunque en parte es así, no es el único estímulo de la subida.

El trepidante ritmo al que nos están obligando a vivir los mercados hace que sea una broma que hablemos de "corrección" cuando a principios de junio la onza cayó hasta los 1.498 dólares, un nivel que sólo tres meses antes hubiera sido una ruptura brutal de máximos históricos.

Si es verdad que desde que comenzaron los problemas con la deuda soberana europea, la onza se ha disparado un 46%. Sin embargo, salvo correcciones puntuales, el oro no ha dejado de subir desde el inicio de la crisis subprime en agosto de 2007, cuando se conoció el primer colapso de un fondo, de BNP Paribas, por su exposición a hipotecas de alto riesgo.

Así, aunque es de manual el hecho de que en momentos de incertidumbre el inversor trata de poner a salvo su cartera en activos refugio, la subida que venimos observando responde también a otros factores como las presiones inflacionistas en los grandes consumidores de este metal precioso -China y, principalmente, India- y al exceso de liquidez que hay en Estados Unidos por cuenta de las políticas laxas de la Reserva Federal. Tres claves que combinadas han creado una bomba de relojería que está llevando al oro a niveles insospechados.

Pero, ¿hasta cuándo va a durar esta tendencia?

De entrada, China e India continúan haciendo acopio de oro físico en tanto que crecen los riesgo de inflación en su territorio. Esta amenaza está llevando a subidas sucesivas de tipos de interés y que, en contra de lo habitual, la estacionalidad que existe en la compra de oro por parte de estos países se haya diluido. Según los últimos datos del World Gold Council, entre los dos acumulan el 58% de la demanda global de lingotes.

Además, contra la tendencia de las últimas décadas, que muestra que el precio del oro en los meses de verano se relaja, estamos viendo que la cotización de este metal precioso se encuentra al rojo vivo desde que comenzó el mes de julio.

Uno de los factores viene marcado por el hecho de que la demanda en India ha seguido en aumento a pesar de no encontrarnos en meses en los que se reclama oro para joyería. Normalmente, el repunte del consumo del metal precioso se produce coincidiendo con la festividad del Akshaya Tritiya en mayo, el Diwali en septiembre y el periodo de bodas hasta diciembre.

Por otro lado, los mercados estaban esperando el final del plan de expansión cuantitativa de la Reserva Federal para ver si la economía podía seguir creciendo por su propio pie. Y es que, desde que estalló la crisis financiera en Estados Unidos, el regulador monetario se ha encargado de inundar de liquidez el mercado.

Pero el hecho de que en las actas de la Fed exista la posibilidad de un tercer ‘quantitive easing’ en caso de que sea necesario y que su presidente, Ben Bernanke, asegurara el pasado miércoles ante el Congreso –aunque luego lo desmintiera ante el Senado- que están preparados para actuar de manera inmediata, ha apoyado el avance del oro.

“El ciclo en Estados Unidos no ha cambiado y mientras siga así el oro seguirá subiendo”, afirma a Cotizalia.com Pablo del Barrio, analista de X-Trade. “Si los tipos de interés subieran y los bancos dieran más dinero, entonces el oro perdería su atractivo”, explica el analista. “Tal y como están las cosas, el oro puede corregir, pero va a seguir siendo alcista”.

En este sentido, Del Barrio augura en el corto-medio plazo que alcance los 1.634 dólares, el siguiente nivel marcado por el análisis técnico y si sigue así estaremos en plena “subida libre”.

Los máximos registrados esta semana están lejos de convertirse en un punto de inflexión en la cotización del oro. Desde que el lunes rompiera por primera en su historia los 1.600 dólares, el metal precioso se ha mantenido estable en ese nivel, con pequeñas oscilaciones en un sentido y en el otro.

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