¿Hasta cuándo se pueden comprar décimos para la Lotería del Niño antes del sorteo?

No tiene nada que ver con la Lotería de Navidad, pero es el segundo sorteo en importancia de la Lotería Nacional. Cada año, igual que ocurre el 22 de diciembre con el sorteo navideño, se repite el Sorteo del Niño el mismo día, siempre el 6 de enero, siempre en día de Reyes. Y que no tiene nada que ver con la Lotería de Navidad es por diferentes razones: la Lotería del Niño tiene lugar en un sorteo que apenas dura media hora, frente a las cerca de cuatro horas de la Lotería del día 22, en la que las niñas y niños de San Ildefonso cantan, casi sin descanso, los "¡mil euros!" más famosos de la historia: los premios de la pedrea.

El sorteo del Niño es diferente por otras muchas razones: el sistema de bombos, por ejemplo. Para la Lotería de Navidad se utilizan únicamente dos bombos, uno grande que tiene en su interior las 100.000 bolas de los números que entran en el sorteo, y uno más pequeño en el que están las más de 1.800 bolas de los premios que se reparten, desde el Gordo hasta las pedreas. En cambio, para la Lotería del Niño se utilizan un total de cinco bombos, que incluyen cada uno todas las posibilidades númericas del 0 al 9. Para los premios con cinco cifras, cada uno de los bombos extrae uno de los dígitos que acaba conformando el número ganador.

La Lotería de Navidad implica mucho más a la sociedad —aunque el Sorteo del Niño también tiene su propio anuncio, si bien no tiene tanta repercusión como el del sorteo navideño—, y es posible que sea porque la Lotería del Niño entrega premios más pequeños que los del día 22, pero también en este sorteo es más fácil que a uno le toque algún premio, porque se destina mucho más dinero a los reintegros.

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El Confidencial

En algo en lo que sí se parece a la Lotería de Navidad es en las probabilidades de ganar el primer premio: son exactamente las mismas. Al fin y al cabo, todos los números, entre el 0 y el 9, tienen la misma posibilidad de salir en cada bombo del sorteo, por lo que no hay superstición posible a la hora de elegir un número, ya sea considerado 'bonito' o 'feo'. Ahora bien... pese a que todos tengan las mismas posibilidades, hay uno que es especialmente afortunado: el cero, que ha sido el reintegro del primer premio en más del 25% de las veces que se ha celebrado el sorteo. ¿Qué le pasa al cero? Realmente la respuesta es sencilla: suerte.

¿Dónde y hasta cuándo comprar décimos?

Para la Lotería del Niño los décimos se pueden comprar en multitud de sitios: además de las administraciones de Lotería, muchas cafeterías, tiendas o establecimientos venden sus propios décimos. Un décimo completo tiene un precio de 20 euros, aunque en ocasiones es posible que uno se encuentre con un décimo por el que le piden uno, dos o tres euros más: hay que tener en cuenta que ese dinero no es el que se está jugando, es un 'extra' que va al bolsillo de quien te lo haya vendido, con la finalidad de financiar una organización, un club o un viaje de estudiantes, entre muchas otras opciones. Cada décimo juega un máximo de 20 euros, aunque te cueste 23.

Aquí surge otra diferencia con respecto a la Lotería de Navidad: para el sorteo del día 22 de diciembre, los décimos se pueden comprar hasta las 20:00 del día anterior al sorteo, es decir, del 21 de diciembre. A partir de este momento ni físicamente ni a través de Internet se puede adquirir números para el sorteo navideño. Sin embargo, para la Lotería del Niño hay un poco más de margen: los décimos se pueden seguir comprando hasta dos horas antes de que arranque el sorteo, que lo hace a las 12:00 de la mañana del 6 de enero. Así pues, los décimos del sorteo del Niño se pueden comprar hasta las 10:00 de la mañana del día de Reyes, 6 de enero. Y lo mismo: tanto de manera presencial en una administración de Lotería como 'online'.