Pérez-Llorca y Garrigues lideran los 'rankings' de M&A en un mercado con respiración asistida
Los bufetes que lideran Pedro Pérez-Llorca y Fernando Vives se sitúan en cabeza en las tablas por valor y número de operaciones. Allen, Uría y Cuatrecasas también logran plaza en los podios
El mercado de M&A está bajo mínimos. Quienes auguraban una fuerte recuperación de la actividad tras el verano, quizá confundiendo deseos y realidad, admiten ya que las fusiones y adquisiciones siguen en la UVI, con respiración asistida, y sin un horizonte claro de mejora. El coste de la financiación, la incertidumbre y la falta de asunción por parte de muchos vendedores de que nadie les pagará por sus activos lo mismo que en el pasado están pesando más que las necesidades de rentabilidad, porque dinero sigue habiendo en el mercado. La confianza es que la situación cambie a partir 2024, pero, si el año nuevo no vuelve a llenar de encargos las mesas de los grandes bufetes, en más de uno quizás empiecen a cundir los nervios. El parón empieza a prolongarse demasiado y en alguna firma han dado ya la orden de frenar o, directamente, congelar las contrataciones.
En un ejercicio tan complejo como el actual, no obstante, Pérez-Llorca puede convertirse en el gran ganador en los siempre codiciados rankings de M&A. Según el informe del tercer trimestre de la plataforma de negocio TTR Data, cuyo contenido adelanta El Confidencial, el bufete que lidera Pedro Pérez-Llorca se sitúa en cabeza de la tabla de despachos por valor de las operaciones, tras haber asesorado en 51 transacciones por valor de 9.862 millones de euros. En la clasificación por número de fusiones y adquisiciones, Garrigues, el dominador en los últimos ejercicios, vuelve a erigirse como gran favorito para terminar el año en cabeza, al concluir septiembre con un total de 109.
No puede dormirse en los laureles Pérez-Llorca, no obstante, pues su liderato está amenazado por un pujante Allen & Overy que, tras anotarse un muy destacado tercer trimestre, salta del séptimo puesto al segundo, con 9.515 millones. La tercera posición es para Uría Menéndez, que roza los 9.000 millones, seguido de Gómez-Acebo & Pombo, con 8.449 millones, y Baker McKenzie, con 8.341 millones.
Algo más alejado del pelotón de cabeza, Linklaters recupera el pulso en M&A con 6.355 millones, para elevarse hasta el sexto puesto. Séptimo es Garrigues, con 6.230 millones; octavo, Clifford Chance, con 5.865 millones, y noveno, Latham & Watkins, con 5.737 millones. Cierra el top 10 Cuatrecasas, con 2.210 millones de euros.
La comparativa con el ranking del tercer trimestre del año pasado permite hacerse una idea de la escasa actividad que se está produciendo en M&A. A estas alturas, en 2022, tres despachos superaban los 20.000 millones de euros en operaciones asesoradas —Freshfields, Pérez-Llorca y Gómez-Acebo & Pombo—, y otros tres estaban por encima de los 10.000 millones —Jones Day, Allen & Overy y Uría Menéndez—. A 30 de septiembre del presente ejercicio, ninguna firma alcanza siquiera dicha cifra.
Por número
Menos significativo es el contraste con 2022 en la tabla de despachos por número de transacciones, lo que puede revelar que el gran golpe lo están sufriendo las grandes operaciones. Tras Garrigues, con 109 fusiones y adquisiciones asesoradas, completan el podio Cuatrecasas, con 77, y Pérez-Llorca, 51.
Detrás de ellos, Uría Menéndez y Gómez-Acebo & Pombo empatan con 46 transacciones. Cierran la clasificación, por este orden, RCD, con 33; Baker McKenzie, con 19, y Linklaters, Clifford Chance y King & Wood Mallesons, los tres con 18.
El mercado de M&A está bajo mínimos. Quienes auguraban una fuerte recuperación de la actividad tras el verano, quizá confundiendo deseos y realidad, admiten ya que las fusiones y adquisiciones siguen en la UVI, con respiración asistida, y sin un horizonte claro de mejora. El coste de la financiación, la incertidumbre y la falta de asunción por parte de muchos vendedores de que nadie les pagará por sus activos lo mismo que en el pasado están pesando más que las necesidades de rentabilidad, porque dinero sigue habiendo en el mercado. La confianza es que la situación cambie a partir 2024, pero, si el año nuevo no vuelve a llenar de encargos las mesas de los grandes bufetes, en más de uno quizás empiecen a cundir los nervios. El parón empieza a prolongarse demasiado y en alguna firma han dado ya la orden de frenar o, directamente, congelar las contrataciones.
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